Las pretensiones de un fútbol que quiere crecer

Luego de la  visita algo mas que protocolar realizaron el presidente de Escorpión Juan Carlos Montoya y el de Bancruz Juan Cruz Sanz al Consejo Federal en Buenos Aires, donde se entrevistaron con el Secretario General Javier Trueque, tratando diversos temas que hacen al deporte de la región, nos quedamos pensando en lo que vivió el fútbol de la ciudad en los últimos años y en las últimas décadas, y cuales fueron los diversos motivos que produjeron cambios notables.

Porque uno de los temas abordados por los dirigentes sureños fue el apoyo que el Consejo Federal puede darles para reconvertir y ampliar el fútbol de la ciudad de Río Gallegos a otros niveles como los que vivió en otro tiempo.

Esto viene a cuento porque la historia del fútbol de Río Gallegos desde los primeros años en 1920 se circunscribía a partidos principalmente con equipos chilenos de Punta Arenas y luego con la presencia de equipos como el Sportivo de Puerto Santa Cruz pero recién en los años 40 se comenzó a formalizar un torneo ordenado aunque en esos años solo existían cuatro equipos que disputaron el torneo como lo fueron Boxing, Hispano, San Lorenzo y Boca, porque Neptuno que venía desde los años 30 ya había desaparecido.

Luego fueron apareciendo otras instituciones en los años 50 como Ferrocarril y el Club Independiente en los años 60, pero el movimiento mas grande se dio en los años 70 con la aparición de Bancruz y Petrolero Austral, aunque también jugaban San Vicente, Municipal y hasta un Velez Sarsfield que duró poco tiempo.

No fue la única vez que aparecieron equipos que pasaron por pocas temporadas por la Liga Sur, creada ésta en 1957 por insistencia de Hispano y San Lorenzo que fueron los impulsores y se llegó incluso a contar con dos categorías donde en la A jugaban los principales que habían logrado el ascenso y en la B los que peleaban por obtenerlo, tales como Vialsud, Mosconi, Huracán, Los Andes y otros por donde incluso pasaron Bancruz y Petrolero antes de ascender a mediados de los 70.

En esos años se contaba con una decena de equipos en la primera (A) y otra decena en la segunda (B), donde varios habían logrado el ascenso dentro del campo de juego y lucían orgullosos su presencia como Los Indios o algún otro venido de la Liga de los barrios como Tío Sam en 1998, o cuando el Atlético de Puerto Santa Cruz jugó en la liga local, lo que duró pocas temporadas, pero sirvió para ampliar el espectro del fútbol local.

Luego los pormenores de la época cambiaron reglas de juego, los gobiernos en algunos casos apoyaron mas otras alternativas porque eran mas redituables en votos seguramente, y la Liga Sur se fue debilitando con incluso algunos rebrotes como Estudiantes en la temporada pasada ( ya hubo un Estudiantes en la década del 60) pero se siguió adelante a pesar de estos pormenores con aportes como Unión Santacruceña, y hoy se mantiene con los clubes clásicos y los que quedan formando la liga, pero ya no están en primera división ni el veterano Independiente ni el clásico Petrolero Austral de los 70 y tampoco Defensores del Carmen, otro que había venido desde la Liga de los barrios en los 90.

Quizás no sirva ahora rasgarse las vestiduras pensando en lo que se hizo o no se hizo, pero sí en la posibilidad de volver a recrear un deporte comprometido con sí mismo, con la necesidad de crecer y ampliar ese espectro que se había logrado hace casi 40 años atrás cuando estaba en pleno desarrollo, pero para ello deberá de haber un compromiso mucho mas grande de todas las partes que componen el fútbol de la Liga Sur, que cuenta con un espectro amplio con jurisdicción en Río Turbio y en El Calafate, donde en algunos años juegan mas equipos que en Río Gallegos.

Será entonces ese objetivo una necesidad perentoria para el futuro cercano si lo que se pretende es volver a un nivel deportivo de importancia en el sur y a un desarrollo que abarque mucho mas de lo que abarca hoy, donde se hace lo que se puede con lo que hay, pero se sueña y se ilusiona con mucho mas.