El barrio El Faro de Río Gallegos está ubicado junto al aeropuerto de la capital provincial y la calle Juan Manuel de Rosas. En él viven, por lo menos, unas 700 familias.
La mitad del sector, aproximadamente, cuenta con los servicios, pero una problemática persistente para la otra mitad hace un extenso periodo de tiempo, es la falta de servicio de cloacas.

Los vecinos mantienen este problema desde hace unos 20 años, precisamente en un sector que se loteó en los años 90, bajo ordenanzas municipales que distan a las de hoy.
Sin embargo, las gestiones para lograr el servicio están llegando y, tras una reunión entre la Junta Vecinal y el Municipio, se reanudará la obra que alcanzará a más de 300 familias.
Jaime Ojeda es referente del barrio y se reunió con el director de Obras Públicas del Municipio, Sebastián Martínez, para avanzar en este sentido. “En esta reunión la buena noticia es que se firmó la adenda para finalizar la obra del barrio con el tema cloacas, y otras obras más que estábamos esperando ansiosos porque se habían parado”, señaló Ojeda a La Opinión Austral.
Es así que, al firmarse la adenda, “da pie para que la empresa retome la obra y la finalice”. Se trata de una obra esperada por los vecinos tras muchos años.
Como Junta Vecinal, indicó Ojeda, saben que la problemática en la zona es variada, pero que se avanza en esos problemas.
En el barrio -estiman- conviven unas 700 familias. La mitad ya cuenta con el servicio
“Tenemos vecinos que están con el tema de los espacios verdes y nosotros que estamos avanzando ahora con cloacas. Es muy importante lo que hemos logrado, hubiéramos querido que sea más rápido, pero en sí lo importante es que se va a dar y es lo que todos estábamos esperando”, indicó el referente barrial.
Con la firma esperamos se reanude cuanto antes la obra para tener el servicio
Asimismo, Ojeda indicó que la Junta Vecinal trabaja junto a los vecinos en cada proyecto que se propone y que se eleva al Municipio para avanzar de forma articulada.
“Tenemos que entender que la ciudad es grande, que todos los barrios tienen una problemática distinta y cada uno la va encarando y peleando para tener una solución”, indicó. El barrio, mencionó Ojeda, se divide en dos etapas: desde Almirante Brown por la calle Francisco Ramírez y Maradona, hasta Cristo Redentor, sector que hoy sí cuenta con cloacas y donde, estiman, viven unas 400 familias.
Luego, viene el sector de abajo del barrio, que parte de la calle Cristo Redentor, por Francisco Ramírez, Maradona y calle Peñaloza, la parte que, esperan tras la firma de la adenda, cuente con las cloacas necesarias.
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