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Una madrugada de festejos por el día del amigo que parecía terminar sin sobresaltos para los vecinos de El Calafate se transformó en escenario de una escena feroz, incomprensible e injustificable. Minutos después de las 6 de la mañana, en la zona de Plaza Pioneros, un joven de 18 años identificado como Matías fue víctima de una golpiza colectiva que lo dejó tendido en el suelo con heridas de gravedad.
Según relataron sus padres al portal de noticias local Señal Calafate, el ataque fue propinado por un grupo de cinco personas que lo patearon mientras yacía indefenso en el suelo. La violencia fue tal que la imagen de la marca de una zapatilla en su frente se convirtió en símbolo del ensañamiento.
Matías fue asistido por personal del Hospital SAMIC, donde se le diagnosticó una fractura de tabique nasal y otras lesiones de consideración. Permanece hospitalizado en observación, mientras su familia intenta encontrar consuelo en medio del desconcierto. “¿Qué pasa en El Calafate?”, se preguntan sus padres con dolor, exigiendo respuestas y clamando por justicia.
De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de fuentes consultadas, el aviso al Comando Radioeléctrico permitió una rápida intervención de la policía, que logró arribar al lugar cuando la agresión aún estaba en curso. Cinco jóvenes fueron demorados en el lugar, uno de ellos menor de edad, mientras otros participantes del hecho lograron huir al notar la llegada de los patrulleros. Según se pudo saber, todos los demorados presentaban aliento etílico y provenían de un boliche cercano, lo que abre interrogantes sobre el control en los locales nocturnos y el consumo problemático de alcohol en espacios públicos.
Todos los acusados tenían aliento etílico y habían salido de un boliche momentos antes.
Los involucrados, cuatro mayores de entre 20 y 25 años y un adolescente de 17, fueron trasladados a la comisaría y puestos a disposición de la Justicia. La Fiscalía de turno ordenó la fijación de domicilio de los cinco, mientras avanza la investigación penal. La madre de Matías confirmó que ya radicaron la denuncia correspondiente que, para ellos, fue calificada como tentativa de homicidio, una figura que podría conllevar penas graves si se comprueba la intencionalidad y la peligrosidad de la agresión.
“Lo golpearon en la nuca, cayó al piso y ahí entre todos lo patearon en la cabeza”, relató la madre, visiblemente conmocionada, al medio local. La imagen que aportó como prueba, donde se observa claramente la marca de una zapatilla sobre la frente del joven, resulta escalofriante y pone de manifiesto la brutalidad del ataque.
“¿Cómo le explico a mi hijo que este sigue siendo un lugar seguro para vivir?”, se preguntó Luis, el padre de la víctima, en una frase que resume no solo la angustia familiar sino también el desconcierto de una comunidad que asiste perpleja a este tipo de episodios violentos.
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