El 4 de febrero de 1991 fue el lanzamiento de Innuendo. Pocos meses después, el 24 de noviembre Freddie Mercury pasaría a la inmortalidad como un ícono de la cultura rock.

 

Grabado entre marzo de 1989 y noviembre de 1990, el disco fue una vuelta a las canciones de secciones distintas entre sí. Suspenso, solos de guitarra de los que participó el guitarrista de “Yes” Steve Howe, y mucho más.

 

Hacia el final de la grabación del disco, el sida recrudece en Mercury, y Brian May, guitarrista de la legendaria banda, contó: “Al final del disco la enfermedad se mostró con toda su dureza. A veces Freddie era incapaz de verbalizar lo que quería expresar”, reveló.

 

“Nosotros, en cierto sentido, aunque suene muy extraño, pero creo que Roger y yo verbalizamos por él; escribiendo algunas de las letras. Porque él había llegado a un punto en el que no podía expresarse con palabras. Así que, en temas como The Show Must Go On, en mi caso, o en These Are The Days Of Our Lives en el caso de Roger, era material que le ofrecíamos a Freddie para que pudiera trabajar junto a nosotros. No hablábamos sobre ello. Estábamos intentando anticipar el final antes de llegar a él”, siguió contando.

 

La icónica producción de la banda estuvo acompañada de las ilustraciones del artista Jean Jaques Grandville, que serán recordadas por la eternidad en el mundo de la música.

EN ESTA NOTA Freddie Mercury queen

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