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El arranque del tradicional “Black Friday” en Ciudad del Este derivó en un descontrol generalizado, con empujones, corridas y enfrentamientos. Bajo el lema “Descuentos sin fronteras”, la feria que conecta a Paraguay, Brasil y Argentina generó una auténtica “estampida humana” ante la expectativa de acceder a tecnología y perfumería con valores de liquidación.
La tensión explotó cuando se concretó la apertura de puertas, prevista para las 8 de la mañana. La multitud, alentada por propuestas agresivas —como notebooks a 80 dólares y fragancias de alta gama a 10 dólares— se amontonó frente a los accesos de los principales centros comerciales, lo que provocó caídas y situaciones de aplastamiento.
Videos difundidos en redes sociales mostraron el instante en que los compradores rompieron el orden para ingresar a las tiendas. En una de las escenas más fuertes, dos personas ruedan por el suelo, forcejeando con violencia por una caja de computadora, mientras una ola de gente avanza sin detenerse.
La Cámara de Comercio y Servicios de la ciudad paraguaya, a cargo de la organización, calculó una convocatoria récord de 300.000 visitantes, superando ampliamente las cifras de la edición previa.
El coordinador del evento, Armando Ghazaoui, resaltó el regreso masivo de los turistas argentinos, quienes volvieron a cruzar la frontera atraídos por la brecha cambiaria y las promociones en dólares.
Declarado de interés turístico por la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur) de Paraguay, la propuesta reúne a más de 90 empresas y se consolida como el mayor movimiento comercial de la Triple Frontera, con ofertas en electrónica, moda y electrodomésticos, aunque las escenas de desborde dominaron el primer día.
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