Las Heras: el Jardín “Talenke Joshen” presentó su feria institucional con más de 600 alumnos

El clima acompañó en la localidad de Las Heras, donde una jornada soleada y con temperaturas agradables fue el marco ideal para la feria institucional del Jardín de Infantes N.º 55. Allí, se dieron cita docentes, directivos, alumnos, familias y vecinos en un espacio pensado para mostrar los proyectos educativos trabajados durante el año.

El evento también contó con la participación de jardines invitados -que acercaron sus propias propuestas- y con una nutrida concurrencia de padres que colmaron las salas para acompañar a los más pequeños.

Proyectos que nacen de la curiosidad

Vilma Cayuñanco, una de las docentes anfitrionas, destacó que cada sala preparó un proyecto diferente. Una de ellas se enfocó en alimentación saludable, abordando hábitos y propuestas lúdicas para mejorar la nutrición de los niños. La otra trabajó sobre temáticas de salud, con intervenciones de profesionales médicos y propuestas vinculadas a la vida cotidiana.

“Muchas veces los proyectos nacen de lo que los chicos preguntan y comentan. La curiosidad es lo fundamental en el nivel inicial y nosotros canalizamos esas inquietudes en propuestas de aprendizaje”, explicó la docente a La Opinión Austral.

El trabajo en equipo como eje

La feria fue una muestra del trabajo colaborativo que caracteriza a la comunidad educativa del jardín. “Acá todo se hace en equipo: docentes, equipos directivos y familias que se involucran muchísimo”, señaló Vilma.

Ante los micrófonos de LOA, la docente subrayó además que la apertura de espacios como esta feria permite que los niños aprendan de manera participativa y que los padres valoren de cerca el proceso educativo.

Más de 600 niños protagonistas

Según los organizadores, participaron alrededor de 600 alumnos de entre 4 y 5 años, lo que convirtió al encuentro en un evento de gran envergadura para la localidad. La feria ofreció distintas propuestas, todas atravesadas por el juego, el aprendizaje y la exploración, generando entusiasmo entre los pequeños y orgullo entre sus familias.

“Es un día de mucha concurrencia, de aprendizaje y de propuestas diferentes”, resumió Vilma, quien celebró la posibilidad de compartir el trabajo del jardín con toda la comunidad.