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El velero “Caoba” zarpó el lunes pasado desde Caleta Hornos, un refugio natural en la costa de Chubut, y recorrió 590 millas a una velocidad promedio superior a los 6 nudos. La travesía fue especialmente exigente para los tres tripulantes debido a los intensos vientos, que en algunos momentos superaron los 45 nudos (85 km/h), el frío y algunos chaparrones. Finalmente, el viernes al mediodía, alcanzaron las Islas Malvinas.
La embarcación de 15 metros de eslora partió el martes 7 de enero desde Mar del Plata con destino a Puerto Argentino, en la Isla Soledad del archipiélago de América del Sur. Bajo el mando de su capitán, Sigfrido Nielsen, a bordo se encuentra un grupo que asumió un viaje cargado de simbolismo y desafíos.
Entre los tripulantes está Alejandro Diego, excombatiente del conflicto bélico de 1982, quien pasó más de dos meses en las islas durante la guerra. “Es un sueño regresar a navegar por estas aguas, un viaje que me conecta con un capítulo muy importante de mi vida”, expresó Diego antes de zarpar. También acompaña Pablo Leoni, marino experimentado que ya había navegado anteriormente hacia el Atlántico Sur con Nielsen.
Tras llegar a Puerto Argentino, la tripulación planea circunnavegar la Isla Soledad, explorando sitios vinculados a la Guerra de las Malvinas y estrechando lazos con navegantes locales y habitantes del lugar. El itinerario prevé dos semanas en las islas, luego de las cuales el “Caoba” se reabastecerá y sumará dos tripulantes adicionales antes de emprender el regreso hacia Buenos Aires.
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