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El Complejo Municipal Gas del Estado, ubicado en la ciudad de Pico Truncado, fue blanco de actos vandálicos que no solo afectan el patrimonio público, sino que evidencian un problema creciente de convivencia social y respeto por los espacios comunes. Durante la mañana del lunes, personal municipal que se encontraba iniciando su jornada laboral descubrió que varias cámaras de seguridad instaladas en la plazoleta circundante al complejo habían sido violentadas. Las imágenes de vigilancia, hasta ese momento, funcionaban correctamente.
Según pudo reconstruirse a partir de la información brindada por el centro de monitoreo de la Municipalidad, el ataque a los equipos se habría producido en el marco del corte de energía eléctrica que afectó a toda la localidad minutos antes de las seis de la mañana. La hipótesis cobra fuerza porque el registro del sistema de monitoreo muestra que las cámaras operaban con normalidad antes de la interrupción del suministro eléctrico, lo que lleva a suponer que los autores aprovecharon la oscuridad y la inactividad del sistema para actuar con total impunidad.
Frente al hallazgo, las autoridades comunales radicaron una denuncia en la Comisaría Primera de Policía de la ciudad, con la esperanza de que una investigación permita identificar a los responsables. No obstante, la situación no es nueva: ya en otras oportunidades se había advertido sobre daños similares en las instalaciones. “En ocasiones anteriores nos dimos cuenta de que las cámaras estaban movidas, apuntando a cualquier lado, o que directamente las habían intentado romper”, comentó una fuente del municipio, con evidente preocupación.
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