Un hecho de sangre se registró en junio del año pasado en Río Gallegos. Se trató del caso conocido como “el crimen de la concesionaria”.

La víctima fatal fue identificada como Franco Cuevas, un joven que había entrado a una agencia de autos armado para intimidar al propietario del lugar: Roberto Neil, un hombre que estuvo unas semanas detenido y, actualmente, se encuentra con prisión domiciliaria con tobillera electrónica a la espera del potencial debate de valoración de pruebas.

Tras el hecho, y hasta estos días, la familia de Neil es blanco de un asedio por parte de los familiares de Cuevas. Tal como lo contó esta semana La Opinión Austral, de manera exclusiva, las cámaras de seguridad de la concesionaria continúan activas y han registrado momentos en los que los allegados a la víctima han proferido amenazas a quien se acerque y hasta arrojando piedras a los grandes ventanales.

En consecuencia, los abogados de Roberto Neil han radicado seis denuncias sobre los delitos de amenazas y daños. Mariana Barbitta y Matías Gutiérrez, los representantes legales del agenciero, fueron entrevistados por LU12 AM680 para que cuenten detalles del caso.

Barbitta fue la primera en hablar y aseguró que, tanto ella como Gutiérrez, están “muy preocupados” por estas situaciones de violencia que se vienen registrando. En el mismo sentido, ratificó la postura que ambos tienen respecto del hecho, “Neil se defendió de una agresión de Cuevas que había entrado al lugar de forma amenazante”.

Neil había sido procesado por “exceso de legítima defensa” pero la carátula cambió en Recursos, cuando Nelson Sánchez opinó que es un homicidio simple. Barbitta dijo que el fallo es “bastante criticable, porque no valoraron las pruebas del expediente ni la declaración de Neil”.

Volviendo al hecho de amenazas, la abogada dijo que “tenemos que pedirle a la jueza que proteja a Roberto Neil y a su familia, la ciudadanía tiene que entender que hay otra víctima. Este lunes vamos a hacer una presentación. Tenemos seis denuncias, donde también hemos solicitado consigna policial. Roberto tiene que estar en libertad hasta el potencial juicio, que eventualmente se resuelva su condena y que quede firme, tiene arresto domiciliario con tobillera” expresó la abogada a La Decana de la Patagonia

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