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El reloj marcaba las 12.05 del mediodía cuando un llamado alertó a la Policía sobre un nuevo episodio de violencia doméstica en Puerto Deseado. La comunicación telefónica advertía que en una vivienda de la calle Osvaldo Bayer se desarrollaba una fuerte discusión de pareja y que una mujer presentaba heridas de arma blanca.
Según pudo saber La Opinión Austral, una comisión policial se trasladó de inmediato hasta el domicilio señalado. Al arribar, los efectivos observaron a una mujer en la parte exterior del inmueble que, al advertir la presencia policial, ingresó rápidamente a la vivienda. En ese momento, un hombre salió al encuentro de los uniformados y les informó que “había problemas familiares” dentro de la casa.
El personal ingresó al domicilio, donde halló a la mujer que minutos antes se había ocultado. Nerviosa y visiblemente alterada, intentó minimizar la situación, asegurando que se trataba de “una simple discusión” y que no deseaba realizar ningún tipo de denuncia. Sin embargo, los agentes notaron que tenía heridas sangrantes en los brazos.
Instantes después, irrumpió en la escena su pareja, un hombre de 43 años que presentaba un notorio estado de ebriedad. Con actitud prepotente y desafiante, intentó interferir en el accionar policial, negando los hechos y elevando el tono de voz. Ante las reiteradas advertencias de los efectivos para que depusiera su actitud, el sujeto avanzó de manera agresiva y fue reducido para evitar mayores incidentes.
Mientras el hombre era asegurado en el móvil policial, la víctima admitió que su pareja había estado bebiendo con un amigo y que, tras pedirles que bajaran el volumen de la música, fue atacada con un cuchillo. A pesar de ello, la mujer insistió en no formalizar la denuncia ni ser trasladada al hospital, asegurando que “solo quería pasar la noche” en el lugar y retirarse al día siguiente.
Los uniformados dieron intervención al área de Políticas de Género, que se acercó al domicilio para intentar convencer a la víctima de iniciar una causa judicial, pero la mujer mantuvo su negativa. En tanto, el agresor fue trasladado al hospital local para su revisión médica y posteriormente quedó detenido en la dependencia policial bajo la carátula de “Inf. Ley 26.485 – Violencia de Género”.
Con conocimiento del Juzgado de Instrucción y Penal Juvenil local, a cargo del Dr. Poisson, se dispuso que el hombre recuperara su libertad una vez cumplidos los plazos legales, previa fijación de domicilio. La medida fue efectivizada durante la madrugada del jueves, cerca de las 4:40.
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