La Justicia sobreseyó a una mujer de Puerto Santa Cruz por la muerte de su beba de un mes.  Tras las correspondientes pericias, se determinó que la menor sufrió muerte súbita.

El deceso ocurrió el 9 de noviembre de 2020, durante las medidas de aislamiento por la pandemia de Covid-19. En aquel entonces, la mujer -quien además tiene otros dos hijos- encontró a la bebé tendida en el suelo y sin respirar en una habitación de su vivienda.

Ante esta situación, la condujo hasta el hospital “Eduardo Canosa”, donde fue declarada muerta en la Guardia. La noticia generó gran conmoción y hubo quienes organizaron protestas contra el maltrato infantil, ya que la madre de la beba había organizado una fiesta clandestina cuando se desató esta tragedia.

Por el caso declararon cerca de quince personas, entre ellas, médicos y enfermeras. También se analizaron cámaras de vigilancia, aunque las pruebas determinantes fueron la autopsia que llevó adelante el Cuerpo Médico Forense, y un estudio hisopar que se realizó en Chubut. Este último significó la remisión de órganos a la vecina, cuyos resultados se conocieron recientemente.

De acuerdo al informe, “los hallazgos de autopsia descartan violencias externas, principalmente síndrome del niño sacudido”. Asimismo, se estableció que “no se detectaron con la anatomía patológica alteraciones estructurales importantes que expliquen el fallecimiento y, en conclusiones médico legales, la causa del fallecimiento es debido a muerte súbita lactante”.

De este modo, y de conformidad con lo dictaminado por la Fiscal, Julieta Ramos, la jueza de Instrucción de Puerto Santa Cruz, Noelia Ursino, dictaminó esta semana el sobreseimiento de la madre de la bebé, por falta de delito.

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