El 6 de septiembre del 2015 fue el último día en el que Marcela Chocobar, una joven trans fue vista por última vez en Río Gallegos. Desde aquel momento, su cuerpo jamás fue encontrado, solo su cráneo fue hallado en el barrio San Benito.

No fue hasta el 2019 cuando los dos principales sospechosos del crimen recibieron penas dispares por el brutal transfemicido. Óscar Biott, un hombre que por estos días se encuentra detenido en la Unidad Penitenciaria N°1 fue sentenciado a la reclusión perpetua y su consorte de causa, Ángel Azzolini, está libre desde hace unas semanas, luego de haber cumplido la pena por “encubrimiento agravado“.

Pese al pedido de la querella, de la Fiscalía y el voto disidente de Joaquín Cabral, en la decisión que tomó la Cámara Oral, Azzolini cumplió su pena, pero todavía está con tobillera electrónica ya que su condena no está firme.

Tal como lo informó La Opinión Austral, una vez que se conoció la sentencia de primera instancia, Santiago Lozada (en ese momento abogado de Biott), Carlos Muriete (querellante en la causa y fallecido por COVID en febrero del 2021) y el fiscal de Cámara Iván Saldivia, presentaron apelaciones para que las sentencias sean revisadas.

El tiempo fue pasando y Azzolini quedó en libertad, pero esto podría cambiar a partir de este martes cuando el Tribunal Superior de Justicia abra sus puertas para revisar la sentencia contra los acusados. Fuentes judiciales consultadas por La Opinión Austral indicaron que la audiencia comenzará alrededor de las nueve y media de la mañana en el edificio ubicado en la esquina de Kirchner y Chacabuco.

Quien quedó a cargo de la querella en la causa es la abogada Carola Zabala, ella junto a Iván Saldivia presentarán como fundamento el voto disidente de Cabral, en el que había indicado que, en vez de encubrimiento agravado, Azzolini sea juzgado como “participe necesario”. De esta manera, el ahora libre, debería volver a la prisión.

Por otro lado, tras la jubilación de Santiago Lozada, quien velará por los derechos y garantías de Óscar Biott es Domingo Fernández. Cabe recordar que en su momento, el defensor que ya no está trabajando había realizado un extenso alegato en el que aseguraba que no había más que indicios y no pruebas, por el ahora condenado por el transfemicidio.

Desde el 13 de abril pasado, Azzolini está en libertad, todos los lunes debe fijar domicilio y abstenerse de cometer nuevos delitos o abusar de bebidas alcohólicas o drogas, además de mantenerse a más de 200 metros de la familia de la víctima de transfemicidio. Fuentes consultadas indicaron que, hasta el momento, no infringió ninguna de las pautas establecidas en el régimen dispuesto desde el Poder Judicial.

Judith, hermana de Marcela, invitó a la comunidad a acompañarlas en las inmediaciones del TSJ : “Este asesino hoy está libre, suelto en la ciudad de Río Gallegos. Desde nuestro punto de vista no tiene contundencia la resolución anterior (carece en todo sentido, hasta de su salida, no tiene ninguna contundencia), es por eso que apelamos, exigiendo que ante la ley esta persona es y fue partícipe necesario para cometer dicho acto. Los invito nuevamente a acompañarnos afuera del Tribunal Superior de Justicia, exigiendo justicia”.

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