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La División Cibercrimen llevó adelante un operativo clave para esclarecer una maniobra de estafa virtual que afectó a vecinos de Río Gallegos. Tras una investigación silenciosa pero meticulosa, se realizaron dos allanamientos simultáneos que permitieron secuestrar dispositivos electrónicos fundamentales para avanzar en la causa.

Este miércoles por la tarde, la División Cibercrimen de Río Gallegos concretó un procedimiento que marcó un avance significativo en la investigación de una estafa virtual, modalidad delictiva regulada en el artículo 173, inciso 16, del Código Penal Argentino. De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de fuentes consultadas se pudo saber que las diligencias se iniciaron luego de una denuncia judicial que alertó sobre maniobras fraudulentas realizadas a través de medios digitales.

La investigación, que demandó tareas de análisis digital, rastreo de conexiones y evaluación de patrones de uso, permitió identificar a dos hombres mayores de edad como presuntos responsables de la maniobra delictiva.

Con los elementos probatorios reunidos, el Juzgado de Instrucción Penal N° 2, a cargo de Yamila Borquez, ordenó realizar dos allanamientos simultáneos, ejecutados durante la tarde en un domicilio ubicado en calle Cochabamba al 200 y en otro emplazado en el Barrio Néstor Kirchner.

Los operativos arrojaron un resultado considerado “altamente positivo” por las autoridades. Según pudo saber este diario, durante las requisas, se secuestraron teléfonos celulares de distintas marcas —entre ellos iPhone, TCL y Samsung—, tarjetas SIM de prestadoras como Claro, discos externos de 1TB, tarjetas de memoria y otros elementos informáticos que podrían contener información clave para reconstruir el circuito delictivo. Todo el material será sometido a pericias especializadas, con el objetivo de recuperar datos, rastrear movimientos y establecer con precisión el rol de cada implicado.

Desde la División Cibercrimen destacaron además que los presuntos involucrados fijaron domicilio a disposición del magistrado interviniente, lo que permite asegurar su vinculación permanente con la causa mientras avanza la investigación judicial. También se informó que el operativo contó con el apoyo de la DDI Río Gallegos y del área de Apoyo Tecnológico, cuya colaboración resultó fundamental en el procesamiento de la evidencia digital.

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