Dieron de alta al ladrón que había sido sometido a golpes por un vecino: fijó domicilio y recuperó su libertad

Un hecho de justicia por mano propia sacudió a Río Gallegos y provocó nuevamente el debate sobre la inusitada violencia con la que los ciudadanos tienen que defenderse a la hora de ser víctimas de un delito contra su propiedad.

El caso fue dado a conocer por La Opinión Austral, una vez que se contó la historia detrás de una serie de fotos y videos donde se puede ver a un delincuente sometido en el suelo de un baño, cubierto de sangre, tras haber sido golpeado por un vecino.

El caso tiene como principal protagonista a J Bosca, un joven delincuente conocido en el barrio Marina como “el terror del barrio” que, en la semana pasada, fue internado en el Hospital Regional, tras haber recibido una feroz golpiza, en el interior de una morada emplazada en el limite del barrio antes mencionado y el Juan Pablo II.

La historia de Bosca es conocida por todos los vecinos de la zona. Él junto a su hermano y otros integrantes de una banda, han cometido delitos en diferentes domicilios bajo la misma modalidad: aplaudir afuera de las casas y, al no notar presencia de moradores, ingresar forzando alguno de los ingresos.

Esta vez, la “suerte” fue esquiva para Bosca ya que terminó con lesiones graves por algunas fracturas y fisuras en sus costillas. “Pasó de terror a momia, estaba todo vendado” aseveró una alta fuente consultada por La Opinión Austral. Finalmente, este martes se supo que le dieron el alta médica y que debió fijar domicilio por tentativa de robo.

Este diario ha reflejado otros delitos cometidos por Bosca, por ejemplo en octubre del año pasado cuando una vecina denunció que estos ladrones habían entrado a su obra en construcción llevándose herramientas y elementos de la misma, por un valor estimado -en aquel momento- por cuatro millones de pesos. “Lo roban para venderlo por droga” había dicho en ese momento la damnificada.