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En un dramático episodio ocurrido en la mañana de este viernes, efectivos de la División Comisaría Segunda de Río Gallegos lograron salvar la vida de una bebé de 8 meses que presentaba serias dificultades respiratorias.

A las 11:10 horas, una mujer de 30 años, visiblemente desesperada, ingresó a la guardia de prevención de la comisaría, con su hija en brazos. Según precisaron fuentes policiales, la pequeña no podía respirar debido a que se había ahogado con flemas.

Ante esta alarmante situación, el Oficial Subinspector José Molloja tomó a la menor y, al notar sus mejillas rojizas y la dificultad para respirar, aplicó de inmediato la maniobra de Heimlich infantil.

Esta técnica, que incluyó golpes suaves en la espalda mientras la bebé estaba boca abajo, permitió que la niña expulsara las flemas y los mocos, logrando estabilizar su respiración y recuperar su coloración normal.

En paralelo, el Sargento Primero Ardiles brindó contención a la madre y coordinó el arribo del personal médico del Hospital Regional. Minutos después, el equipo sanitario llegó al lugar y tras evaluar a la beba, determinó que no era necesario su traslado al nosocomio, dado que se encontraba en buen estado de salud.

La rápida acción del personal policial fue clave para evitar un desenlace trágico y es un ejemplo de profesionalismo y compromiso con la comunidad.

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