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La Dirección General de Policía Caminera de Santa Cruz llevó a cabo una serie de operativos de control en distintas rutas y localidades de la provincia, con resultados alarmantes. Durante las inspecciones, se detectaron casos de alcoholemia positiva que superaron ampliamente los límites permitidos, así como infracciones graves a la Ley Nacional de Tránsito.
En una jornada intensiva de controles viales, la Policía Caminera desplegó operativos en varias unidades operativas de la provincia.
Uno de los casos más graves se registró en la División Operativa Caminera Chimen Aike, donde un conductor de un Toyota Corolla fue detectado con una alcoholemia de 2.37 g/L, un valor que supera ampliamente el límite permitido de 0.5 g/L establecido por la Ley Nacional de Tránsito además de ir en contra de la Ley de Alcohol Cero que rige en las rutas de Santa Cruz. El hecho ocurrió alrededor de las 15:15 horas del sábado, cuando el hombre intentaba ingresar a la localidad de Río Gallegos. Ante esta situación, las autoridades procedieron a labrar las actuaciones correspondientes y retiraron al conductor de la vía pública, evitando un posible siniestro vial.
Por otro lado, en la Ruta Provincial N°5, en el tramo Barda Las Vegas – Paso La Esperanza, se implementó un operativo. El control, que se extendió entre las 11:30 y las 13:10 horas, no registró novedades significativas, lo que refleja un cumplimiento adecuado de las normas de tránsito en esa zona. Sin embargo, este caso contrasta con lo ocurrido en la Ruta Nacional N°3, kilómetro 2618, donde un conductor de 26 años, domiciliado en Puerto San Julián, fue infraccionado por circular sin la documentación reglamentaria. El hombre se presentó en el control para retirar su licencia de conducir habilitante, pero lo hizo manejando una Ford Ranger blanca, lo que derivó en el secuestro del vehículo y la correspondiente sanción
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