Un hecho por demás aberrante fue juzgado en la Cámara Oral de Río Gallegos, en horas de la mañana de este lunes, cuando un hombre fue sentado en el banquillo de acusados por haber abusado sexualmente de sus dos hermanas.
El caso tiene como acusado y actualmente detenido en el interior de nuestra provincia a un hombre de apellido Mancilla. Él está imputado por haber sometido a vejámenes a sus familiares durante un largo lapso de tiempo, desde que él era menor de edad hasta después de haber cumplido la mayoría de edad.
De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de fuentes judiciales consultadas, se pudo saber que todo ocurrió en un domicilio del barrio Belgrano de nuestra ciudad capital y, hace años, las víctimas juntaron coraje y contaron a lo que eran sometidas.
Mancilla se encuentra detenido en San Julián y, durante el fin de semana fue trasladado a Río Gallegos. Este lunes finalmente fue enjuiciado. Según pudo saber este diario, el tribunal fue conformado por Jorge Yance como presidente, Joaquín Cabral como vocal titular y Enrique Arenillas como vocal subrogante.
Pese a que Mancilla dio una declaración lisa y llana de los hechos, las víctimas -que hoy son mayores de edad- tuvieron su oportunidad de contar a lo que fueron sometidas por parte de su propio hermano.
El abogado de Mancilla fue Raúl Guerrero y, aunque no hubo querella, quien veló por los intereses de la sociedad, fue Federico Heinz junto a Analía Molina como jefa de despacho. Para el representante del Ministerio Público los delitos estuvieron acreditados y solicitó la pena de once años de prisión. Cabe remarcar que el pedido de pena fue único para los abusos que el acusado cometió cuando ya era mayor de edad, en tanto que los que efectuó cuando era menor, solo corre la responsabilidad penal
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