Tres turistas extranjeros lesionados tras accidentarse en la Ruta N° 40 por las inclemencias climáticas

La Ruta Nacional N° 40, ese emblemático corredor que serpentea la Patagonia y atrae a aventureros de todo el mundo, se convirtió este jueves en el escenario de una sucesión de incidentes que pusieron a prueba la capacidad de respuesta de las fuerzas locales.

Entre motociclistas accidentados, turistas en apuros y hasta un colectivo hundido en el barro, la División Subcomisaría Tres Lagos vivió una jornada agotadora que dejó en evidencia los riesgos de transitar por una zona donde la naturaleza y las condiciones del camino no perdonan.

De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de fuentes consultadas, se pudo saber que todo comenzó pasadas las 16:45, cuando una llamada al número de emergencias alertó sobre la activación de una baliza de auxilio en el kilómetro 73. Al llegar, los efectivos se encontraron con un panorama desordenado: dos accidentes de moto en puntos cercanos pero distintos, ambos con víctimas que requerían asistencia urgente.

El primero involucró a una familia brasileña que recorría la ruta en una motocicleta BMW GS. María Angélica Duarte Ferreira, al mando del rodado, perdió el control y cayó al ripio, golpeándose una pierna. Junto a ella viajaban Joao Paulo Ferreira y Francisca Duarte, quienes afortunadamente escaparon ilesos. Minutos después, casi en un guion de película, otro motociclista —esta vez un estadounidense de 56 años, Brozon Shain Gómez— sufrió una caída cerca de una conocida estancia, con un diagnóstico preocupante: una posible fractura de tibia y peroné.

Mientras el personal del Puesto Sanitario de Tres Lagos se movilizaba para trasladar a los heridos, un tercer accidente sumó más tensión: una turista brasileña con un esguince de tobillo. Pero el colmo llegó cuando un colectivo de la empresa TAQSA quedó atrapado en el barro, obligando a un operativo conjunto con Vialidad Provincial para liberarlo.

Entre idas y venidas, la policía local no sólo atendió los siniestros viales. También acompañó a un móvil sanitario hasta La Siberiana, donde un peón rural sufrió un accidente doméstico. “Sin el apoyo de los efectivos, hubiera sido imposible llegar a tiempo por el estado de los caminos”, admitió uno de los médicos