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Una situación de tensión y alarma se vivió en la noche del domingo en el populoso barrio San Benito de Río Gallegos, cuando un principio de incendio en una vivienda obligó a una rápida intervención de las fuerzas de seguridad y de emergencias. El siniestro, que tuvo lugar alrededor de las 23:30 horas del 27 de julio, se originó por una falla eléctrica en el entretecho de la propiedad ubicada en la intersección de las calles 30 y 21, en la manzana 265, lote 07.

El hecho fue reportado a través de las líneas rotativas a la División Comisaría Séptima, cuyos efectivos acudieron de inmediato al lugar y solicitaron la asistencia de personal especializado del Cuartel 24 de Bomberos. Al arribar, los bomberos constataron la presencia de humo denso emanando desde el sector superior de la vivienda, producto de un cortocircuito en una instalación eléctrica defectuosa, que había comenzado a prender fuego el material aislante del techo.

Los agentes se percataron de una columna de denso humo que emanaba de la zona del entretecho.

La intervención fue rápida y efectiva. Gracias al profesionalismo de los servidores públicos, el foco ígneo pudo ser sofocado antes de que las llamas comprometieran la estructura general de la casa. Técnicamente, el hecho fue caratulado como “principio de incendio sobre vivienda por contingencia eléctrica”.

El estado en el que quedó el entretecho. (FOTO: POLICÍA SANTA CRUZ)

En el interior del domicilio se encontraban dos personas mayores, quienes fueron quienes inicialmente detectaron la presencia de humo y alertaron a las autoridades. Según relataron, el humo comenzó a propagarse sin previo aviso y, en cuestión de minutos, el entretecho empezó a incendiarse. Su reacción inmediata fue clave para evitar una tragedia mayor.

Afortunadamente, no se registraron personas heridas ni víctimas por inhalación de humo. Como parte del protocolo, se dio aviso a Servicios Públicos Sociedad del Estado (SPSE), para que inspeccionara las condiciones eléctricas del lugar y evitara nuevos incidentes. Asimismo, los propietarios recibieron recomendaciones de seguridad por parte de los bomberos, incluyendo medidas preventivas relacionadas con el uso de instalaciones eléctricas, en especial en viviendas de construcción mixta o con sistemas precarios.

 

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