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El natatorio municipal “Chela” Gay de Río Gallegos volvió a ser víctima de un robo. El segundo en menos de un mes. A través de un comunicado en redes sociales, la institución detalló cómo un hombre, disfrazado de personal de mantenimiento, sustrajo herramientas y productos de limpieza en plena jornada laboral. El hecho encendió las alarmas por la recurrencia del delito y por el riesgo que implica la seguridad de los vecinos que asisten al lugar.
El sujeto –vestido con un mameluco de trabajo y una gorra visera azul– actuó con total descaro, aprovechando el horario de mayor afluencia de personas. “Similar a lo ocurrido el 14 de abril“, señalaron desde el natatorio, el ladrón se hizo pasar por empleado de una empresa contratista y logró llevarse un taladro inalámbrico, resmas de papel y productos de limpieza, algunos adquiridos mediante convenios comunitarios. “Este individuo, porque de otra manera no lo podemos llamar, se llevó sin más los elementos que con tanto sacrificio obtuvimos“, expresaron con indignación.
Aunque el personal logró identificarlo –e incluso compartieron imágenes de las cámaras de seguridad–, el hecho reavivó el reclamo por mayores controles. “No implica prever seguridad“, admitieron, refiriéndose a la intervención policial posterior, pero destacaron la necesidad de alertar a la comunidad para evitar nuevos incidentes
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