En la provincia de Santa Cruz se cuentan por miles los trabajadores y trabajadoras que podrían dejar de pagar el impuesto a las Ganancias, luego del anuncio del ministro de Economía de la Nación y candidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa, que anunció el lunes un proyecto de ley que busca modificar el piso de ese tributo.

No obstante, el Gobierno nacional tomó la decisión de que, partir del 1 de octubre próximo, el piso del impuesto a las Ganancias suba hasta 1.770.000 pesos mensuales, lo que eximirá del pago a unos 800.000 contribuyentes y dejará al margen de la carga al 90 por ciento de quienes actualmente lo tributan.

La medida precisó que el piso será equivalente a 15 salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM) mensuales, actualmente en $ 118.000. “Hemos tomado la decisión de, por decreto, impulsar desde el 1 de octubre un mínimo no imponible de 1.770.000 pesos. En la Argentina sólo van a quedar 80.000 gerentesjubilados de privilegio o beneficiarios de altos ingresos pagando el impuesto a las Ganancias“, aseguró Massa.

Para el mundo laboral de Santa Cruz, particularmente en la faz privada, todo lo que respecta a la suba de los mínimos no imponibles siempre ha sido un tema de mucha controversia. Hay dos actividades que -además- son las más importantes de la provincia en términos de producción, como la minería y el petróleo, donde este gravamen siempre impactó fuertemente en los sueldos de ambos sectores. Extraoficialmente se conoció que, solamente por la eliminación de lo que se denomina la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias, dejarían de pagar el gravamen unos 4998 santacruceños.

Actualmente, la minería cuenta con la nada despreciable cifra de unos 9 mil trabajadores, los cuales en su inmensa mayoría (por no decir prácticamente todos) pagan el impuesto a las Ganancias. Fuentes del gremio que los representa indicaron a este medio que aún es difícil estimar cuántos quedarán fuera del pago con la medida parcial que se tomará a partir del mes de octubre.

Un panorama similar se vive en la industria hidrocarburífera, donde existen unos 6 mil trabajadores entre obreros de base y jerárquicos. Ya en el caso de algunos de ellos, por acuerdos con algunas empresas del sector, habían dejado de tributar este gravamen. Sin embargo, en caso de que el proyecto se sancione finalmente en el Congresola gran mayoría de los petroleros dejaría de abonar al fisco por este impuesto.

Pero este anuncio también es seguido de cerca por las provincias. Es que el impuesto a las Ganancias se coparticipa con los distritos y, al menos desde el mes de octubre, la masa coparticipable se achicará considerablemente en este rubro. Ante esto, las provincias estarían esperando algún mecanismo de compensación por esta pérdida de ingresos, aunque por el momento no se tendría en claro cuáles serían estas medidas.

Algunas, como en el caso de Córdoba, ya han empezado a quejarse abiertamente y otras esperarán las confirmaciones que se darán en las próximas horas.

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