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La Corte Suprema de Justicia de la Nación decidirá, en las próximas horas, sobre la causa denominada Vialidad, que tiene en el centro de la escena a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. La exmandataria fue condenada en 2022 a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, fallo que fue confirmado en 2024 por la Cámara de Casación. Desde entonces, el futuro judicial y político de la actual líder del Partido Justicialista quedó en manos del máximo tribunal.

En este contexto, agrupaciones políticas y ciudadanos comenzaron a organizarse en Río Gallegos para acompañar a Cristina en lo que consideran una nueva ofensiva judicial con fines políticos. La agrupación Propongamos un Sueño encabeza una vigilia colectiva que busca visibilizar el apoyo a la ex presidenta, en rechazo a lo que describen como un intento de proscripción.

La propia Cristina se refirió recientemente a la causa con fuertes declaraciones que resuenan en todo el arco político:
“¿Creen que van a solucionar esto metiéndome presa? Dale, meteme presa. ¿Y qué van a hacer? ¿La gente va a ganar más plata? ¿Le van a subir el salario a los argentinos? ¿Van a financiar las escuelas y los hospitales? ¿Van a pagar la deuda con el FMI y con los bonistas?”, planteó.

“Mientras caminen por la calle libres de polvo y paja los que hicieron mega canjes, endeudaron al país con el FMI y lo siguen endeudando, los de las autopistas, el correo, sigan en libertad, créanme que estar presa es un significado de dignidad. Lo siento de esta manera”, agregó en tono desafiante.

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