Casa Salesiana realiza la campaña “Abrigados de esperanza”: “La gente está colaborando”

La Casa Salesiana está llevando adelante la Campaña “Abrigados de esperanza” que reúne camperas de abrigo y zapatillas.

“En el marco de las actividades pastorales que se proponen desde la Casa Salesiana, más allá de un nivel educativo y de toda su actividad social, humana, cristiana y las participaciones de los integrantes de la Casa, hay momentos del año en los que solicitamos ayuda para llegar a las familias, no sólo de la Casa Salesiana, sino de la sociedad en general, así es como hemos llegado en este mes a hacer una colecta de ropa de abrigo y calzado”, explicó el director de la Casa Salesiana, Héctor Acosta, en comunicación con Radio LU12 AM680.

La campaña inició a mediados de la semana pasada y respecto a la repercusión, Acosta, afirmó: “Hemos tenido muy buena respuesta. La gente de Río Gallegos y la gente de la Casa Salesiana que es parte de la ciudad, es muy solidaria, está muy presente”.

“Estamos muy contentos porque la gente está colaborando”, manifestó.

Puntos de acopio

Las donaciones se pueden entregar en la portería del Colegio Salesiano “Nuestra Señora de Luján”, en calle Fagnano 142 o de la Escuela Laboral Domingo Savio, en Defensa 633.

Asimismo, quienes participan de actividades de la Casa Salesiana pueden acercar los abrigos o calzados en los horarios de sus grupos.

“Una de las caracteristicas de los salesianos que fuimos heredando es trabajar en diferentes tipos de comunidades. Actualmente, trabajamos en un par de barrios, más las necesidades de nuestras familias, esto lo hacemos a través de trabajadores sociales o gabinetes de orientación escolar. Así vamos identificando los diferentes pedidos”, explicó.

“Estamos viendo que hay una cantidad de familias que no llegan a poder comprar una campera o unos buenos zapatos o zapatillas, se viene el frío y a través de las familias que vamos identificando vamos proporcionándole las donaciones”, señaló.

“Si alguien tiene la intención de hacer algo más, de darnos una mano para trabajar en los diferentes lugares, en los barrios, con los chicos, se pueden acercar al colegio y comentárselo a algún directivo. Siempre alguna mano, viene bien. Lo esperamos”, concluyó.