Este miércoles, se realizo una emotiva ceremonia en las instalaciones de la X Brigada Aérea de la Fuerza Aérea Argentina en Río Gallegos para celebrar el egreso del “Curso de soldados sirvientes de armas antiaéreas“.

Luego de la entonación de las estrofas del Himno Nacional Argentino -acompañado por la banda militar de la Fuerza Aérea-, y tras la bendición de los diplomas, boinas y distinciones, los soldados recibieron sus certificaciones.

Entre los soldados distinguidos, se encuentra Fabricio Acosta, quién recibió diferentes menciones especiales por su desempeño durante el curso de capacitación.

Nos sentimos muy orgullosos, tanto personalmente, como el grupo. Con mis camaradas pudimos superar las diversas pruebas, teóricas y prácticas que pasamos en este curso. Fue bastante difícil, nos llevó bastante tiempo y muchísimo esfuerzo“, expresó el soldado en diálogo con La Opinión Austral

Y agregó: “Para nosotros es un logro, llevar a cabo todo este esfuerzo para poder llevar adelante esta especialidad. Personalmente es un gran logro, por más elogios que haya recibido, no sería nada sin mis compañeros”.

Por su parte, otras de las egresas, la soldado Luz María Mamaní, se mostró orgullosa por el logro obtenido y abogó por seguir capacitándose.

Estoy muy orgullosa de pertenecer a este hermoso escuadrón. Es un objetivo logrado para mi, pertenecer acá es lo que quería desde que ingresé a la Fuerza Aérea. Estoy muy orgullosa de terminar el curso con mis compañeros. En la siguiente etapa seguiremos instruyéndonos en los estudios y la parte práctica”, manifestó la joven.

En ese tenor, añadió: “Es un destino que enseña muchas cosas que nunca imaginé aprender. Estoy muy instruida a raíz de este curso y la verdad me encanta poder decir que orgullosamente soy de este escuadrón. Es lo que yo quería, poder ingresar acá es lo mejor que me pudo haber pasado”.

Queremos seguir aprendiendo, salir al terreno, todavía nos falta, falta más estudio y práctica para seguir adelante“, concluyó.

Por último, el jefe de la guarnición aérea de Río Gallegos, comodoro Martín Miguel Gómez, habló con La Opinión Austral y destacó la formación de los soldados voluntarios en las distintas especialidades de la Fuerza Aérea.

Tener cinco nuevos sirvientes de armas antiaéreas es un orgullo. El testimonio de los soldados habla de la alegría que genera. Es un esfuerzo grande que tuvieron que hacer. El curso duró un mes, donde se le da toda la generalidad del arma antiaérea, el manejo de las piezas y la función fundamental del sirviente, que es el que abastece la munición, una tarea muy importante. Ellos están orgullosos y tienen una gran responsabilidad”, expresó.

En ese sentido, Gómez aseguró que la brigada aérea de Río Gallegos está “en constante crecimiento” y sostuvo que “es un orgullo poder tener esta clase de soldados capacitados con una especialidad avanzada”.

Comodoro Martín Miguel Gómez, jefe de la X Brigada Aérea de Río Gallegos. FOTO: LEANDRO FRANCO/LA OPINIÓN AUSTRAL

Por otro lado, el jefe de la X Brigada explicó que los soldados voluntarios “tienen distintas especialidades y pueden ascender, entonces realizan cursos de capacitación constantemente”.

Los soldados van obteniendo capacitaciones y puede lograr ingresar a la Fuerza Aérea como suboficiales. Es una carrera promisoria y sobre todo en una unidad como esta que está creciendo“, aseguró.

Para concluir, tras los recientes anuncios del Gobierno Nacional para la incorporación de nuevos aviones F-16 a la Fuerza Aérea Argentina, Gómez indicó que “hace varios años la fuerza viene en un cambio de paradigma y viene creciendo”.

“Nosotros no estamos ajenos, la X Brigada Aérea nuevamente, por la posición estratégica que tiene, tuvo la incorporación de los Twin Otter, de los Pampa, próximamente está la posibilidad incorporar un helicóptero. Vamos a seguir creciendo, realmente la posición en Río Gallegos es fundamental para la estrategia de la defensa de nuestro país“, concluyó.

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