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El Macá Tobiano (Podiceps gallardoi) es un ave endémica de Santa Cruz que se ha convertido en un símbolo de la lucha por la conservación en Argentina. Descubierta en 1974, esta especie enfrenta un declive alarmante en su población debido a la depredación, el cambio climático y la alteración de su hábitat. Hoy, se estima que quedan menos de 800 individuos en estado silvestre, lo que convierte cada rescate en una batalla crucial por su supervivencia.

El pasado 12 de marzo, a las 14:30 horas, se activó un protocolo de emergencia en la Estación Biológica “Juan Mazar Barnett”, administrada por la Fundación Aves Argentinas. Un mensaje de teléfono satelital alertó sobre un pichón en peligro en la laguna del Asador, una de las colonias de Macá Tobiano más importantes de la región.

El voluntario Maxi, quien vigilaba la zona, encontró al pichón al borde de la laguna, abandonado por sus padres y con dificultades para moverse. Había sido atacado por un Quetro Volador, un pato de gran porte y comportamiento territorial que suele agredir a otras especies.

Con rapidez, Maxi y otros voluntarios recolectaron anfípodos, pequeños crustáceos que forman parte de la dieta del Macá Tobiano, para alimentar al pichón. Luego, emprendieron una caminata de 6 kilómetros hasta el puesto más cercano, donde esperarían al equipo de rescate proveniente de la estación biológica. Paralelamente, un grupo de técnicos y especialistas partió hacia la meseta del lago Buenos Aires, un viaje que demandó tres horas y media por terrenos agrestes.

“Mientras tanto, otro técnico subía a la meseta para recolectar más anfípodos y facilitar el cambio gradual a la dieta que utilizamos en la recría de los pichones”, explicaron desde Aves Argentinas. Una vez reunidos en el puesto, el equipo revisó al pichón y decidió su traslado inmediato a la estación biológica para brindarle los cuidados necesarios.

El viaje de regreso fue tan meticuloso como el rescate. Cada media hora, el vehículo se detenía para alimentar al pichón y colocarlo en una batea con agua, ya que el Macá Tobiano solo defeca en este medio. Este nivel de detalle es fundamental para asegurar la supervivencia de un animal tan vulnerable.

El trabajo de organizaciones como Aves Argentinas y su “Proyecto Patagonia” es vital para revertir esta tendencia. Desde 2009, han implementado programas de monitoreo, rescate y recría de pichones, además de campañas de concientización para involucrar a las comunidades locales en la protección de esta especie.

“Gracias al compromiso y la rápida acción de todo el equipo, este pichón recibió la atención necesaria. Esta es otra acción que refuerza, una vez más, la importancia de la presencia de los guardianes de colonia. ¡Cada pichón de Macá Tobiano vale estos esfuerzos!”, manifestaron desde Aves Argentinas y su “Proyecto Patagonia”.

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