Luego del ciberataque que padeció en octubre, la Biblioteca Británica comenzó a trabajar en la recuperación de sus servicios online y en el acceso al archivo, un proceso que, según informó su director, podría demorarse un año hasta restablecer completamente el servicio.
En los primeros días del año, la institución ha habilitado el acceso a una parte de su archivo pero bajo el formato de "sólo lectura" y anunció que el restablecimiento completo de los servicios proporcionados por la biblioteca nacional del Reino Unido podría tardar hasta finales de año.
"La recuperación total de todos nuestros servicios será un proceso gradual", dijo Sir Roly Keating, director ejecutivo de la biblioteca en una publicación de blog. Además, se disculpó porque "desde hace dos meses se ha privado del acceso a la colección de la biblioteca a investigadores que dependen para sus estudios y, en algunos casos, para su sustento", según reproduce The Guardian.
El catálogo principal de la biblioteca, una herramienta importante para investigadores de todo el mundo, estuvo caído desde el ataque, que habría sido ejecutado por Rhysida, un conocido grupo de ransomware -como se conoce al tipo de programa que permite robar información y restringe el acceso a determinados archivos del sistema-,que se atribuyó la autoría. En noviembre, la biblioteca confirmó que algunos datos de los empleados habían sido robados en el ataque y que habían sido puestos a la venta en la "deepweb".
"La ausencia del catálogo principal en Internet ha sido quizás el impacto más visible del ciberataque criminal. Y quiero reconocer lo difícil que ha sido esto para todos nuestros usuarios", aceptó el director de la institución sobre el efecto concreto que el ataque tuvo sobre los usuarios.
Los detalles de cómo será el largo proceso de restauración del catálogo se conocerán el lunes, pero según adelantó el funcionario en el posteo que subió al blog de la institución, el catálogo principal funcionará de forma similar mientras el proceso de verificar la disponibilidad y ordenar artículos para su uso en las salas de lectura de la biblioteca será diferente.
"Han sido un par de meses difíciles para todos nosotros en la Biblioteca Británica", concluyó Keating y se disculpó por la falta de protección de los datos personales de los usuarios y el personal de la biblioteca.
La Biblioteca Británica continúa trabajando con la Policía Metropolitana y asesores profesionales en ciberseguridad para descifran el destino del material robado y la identidad de los atacantes.

(Télam)

Leé más notas de Télam