Las trabajadoras domésticas deberán cobrar sus haberes de marzo completos y con un 5% o de aumento. Con los de abril, se les tendrá que sumar un porcentaje similar. Además, en la región se les deberá abonar por zona desfavorable.

A consecuencia de la aplicación de la cuarentena contra el COVID-19, las empleadas permanecen en sus hogares.

Los empleadores deberán respetar las pautas acordadas en paritaria y pagar entero el mes que acaba de concluir, pese a los días de cuarentena en que las trabajadoras no tuvieron actividad, ya que el rubro no fue exceptuado como un servicio esencial entre las disposiciones de Nación.

La obligación de presentarse a cumplir funciones solo rigió para las cuidadoras de ancianos y personas desvalidas cuya atención no puede ser abandonada.

Los 10 mil por la emergencia 

En otro orden de cosas, las trabajadoras de casas particulares, tanto las que están registradas por sus empleadores como las no registradas, podrán recibir el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) de $10.000. Pero solo en el caso de que ningún otro miembro de su grupo familiar cuente con un salario.

Se estima que existen 1 millón en la informalidad

Además de las trabajadoras domésticas cuyos empleadores realizan el aporte de sus cargas sociales mensualmente, se estima que hay un millón de empleadas de casas particulares que están en la informalidad.

Otros dos requisitos excluyentes son ser argentina nativa o naturalizada y residente, con una residencia legal en el país no inferior a dos años y tener entre 18 y 65 años de edad.
Por eso, los empleadores deben otorgarles licencias con goce de sueldo en los casos de que sean mayores de 60 años, tengan bajo su cuidado a hijos menores en edad escolar o estén dentro de los grupos de riesgos por enfermedades crónicas.

Para las personas que no tienen una cuenta bancaria, el organismo está trabajando en la implementación de un sistema de pagos a través de Banco Nación o el pago en efectivo en oficinas del correo.

Aumento del 10% en dos pagos

Por otro lado, a través de una Resolución publicada la semana pasada, la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares determinó un aumento en los salarios mínimos del 10% para el personal doméstico: se aplicará un 5% a partir de marzo y 5%, no acumulativo, a partir de mayo.

De esta forma, se busca también apuntalar los ingresos del sector en medio de la crisis por el coronavirus. Con la nueva escala salarial, la hora de trabajo quedó establecida en $139,50 para el personal que realiza tareas generales con retiro y en $150 para el personal sin retiro a partir de marzo. Y de $144,50 y $155,50 respectivamente, a partir de mayo.

En tanto, el salario mensual para el personal que realiza tareas generales quedó fijado en $17.150 (con retiro) y $19.070 (sin retiro) a partir de marzo y $17.785 y $19.777 a partir de mayo.

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