Así lo aseveró el flamante decano de la Facultad Regional Santa Cruz, Sebastián Puig, luego de que Martín Goicoechea, investigado por administración fraudulenta, renunciara a su cargo. Remarcó la importancia de “preservar la institucionalidad” y fue contundente al rechazar una posible intervención que “arrase todo”.

La Facultad Regional Santa Cruz de la UTN tuvo el jueves un cambio de autoridades. En asamblea, se aceptó la renuncia de Martín Goicoechea y se dio paso a la elección del nuevo decano, quedando el puesto en manos del Lic. Sebastián Puig, quien oficiaba antes como vicedecano.
El pedido de renuncia del exdecano se dio por cuestiones personales, específicamente relacionadas a la causa por la que se lo investiga y fue procesado, en torno al desvío de fondos para la puesta en marcha de la mina de carbón de YCRT. Es de recordar que por la misma se encuentra preso Julio de Vido y también procesado el intendente de Río Turbio, Atanacio Pérez Osuna.
El móvil de Radio LU12 AM680 entrevistó ayer al flamante decano Puig. En primer término, aseveró que los desafíos de la facultad continúan siendo los mismos, es decir, “brindar una formación de calidad y excelencia para todos los jóvenes de Santa Cruz”.
“El desafío pasa por ahí -aseguró-, que sea una facultad inclusiva y de respuestas al desarrollo regional y sistema productivo, acompañando al Estado, aportando la ciencia y la academia. Sobre todo formando recursos humanos de la zona”.
En ese sentido, dijo que “hay cosas muy bien hechas y otras que tenemos que profundizar y mejorarlas. También adaptarlas, la adaptabilidad es el éxito de la supervivencia de las especies, si no sabemos entender los tiempos que vienen y no podemos interpretar y sintetizar eso, no estaríamos”.
Consultado sobre de qué sirve ser “del riñón universitario”, dijo que esto contribuye mucho, ya que “soy de Río Gallegos, empecé en esta facultad y sé que lo de acá también es importante”.
Con respecto a los acontecimientos de público conocimiento que derivaron en la renuncia de Goicoechea, sostuvo: “las personas somos circunstanciales, la institución es la que prevalece y la que queda. Eso es realmente lo importante”, remarcando que se busca “preservar la institucionalidad”.
En este punto, dijo: “hubo cuestionamientos del tipo intervencionista a una institución que está constituida democráticamente, que no es menor” y apuntó que “acá resulta que el principio de presunción de inocencia, un derecho constitucional, no parece aplicado”.
“La Justicia está trabajando y tendrá que determinar, no hablo de culpabilidad o inocencia de personas, me parece que las instituciones son las que se tienen que preservar”, agregó.
Cuestionando la posibilidad de que la facultad sea intervenida, sostuvo que esto implicaría “que venga gente de afuera, que arrase todo y desarme sistemas o proyectos llevando elementos de laboratorios” y ejemplificó con “un microscopio electrónico de barrido para el estudio de materiales”, que “es el único en 30 facultades con presupuestos muchísimos más altos que esta”.

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