Víctor Díaz, el peón rural que conmovió al país, fue despedido tras publicar un video en redes mostrando una silobolsa dañada.
“Yo solo dije que la culpa era de todos”, explicó. El contenido no cayó bien a un ingeniero agrónomo y el viernes le comunicaron su despido. El momento más doloroso fue dejar al perro que lo acompañó durante 11 años. Su llanto frente a cámara se volvió viral.
Tras la repercusión, el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires inspeccionó la estancia y detectó graves irregularidades laborales: cables expuestos, falta de elementos de protección y condiciones insalubres. Intimaron al empleador a regularizar la situación.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia
Dejanos tu comentario