El recuerdo a 30 años de la “Nevada del Siglo” en Río Gallegos

A 30 años de la Nevada del Siglo en Río Gallegos: Testimonio de Alfredo “Freddy” Martínez

El 26 de julio de 1995, una intensa nevada azotó la ciudad de Río Gallegos, Santa Cruz, acumulando hasta 75 cm de nieve, ráfagas de 70 km/h y una sensación térmica de -22 °C. La ciudad quedó aislada: se clausuraron rutas, se suspendieron vuelos y se declaró la emergencia.

Entrevistado: Alfredo Anselmo “Freddy” Martínez, entonces intendente de la ciudad, quien ya transitaba los últimos meses de su primera gestión.

“Fue la Nevada del Siglo”
Martínez relató cómo esa madrugada lo despertó un llamado del Corralón municipal alertando sobre la nieve. Al mirar por la ventana, vio su camioneta prácticamente tapada, y de inmediato comprendió que la situación era grave.

Declaración de emergencia: Martínez firmó un decreto y activó el protocolo de Defensa Civil, coordinando rápidamente con el gobernador Néstor Kirchner y fuerzas de seguridad, ejército, marina y aeronáutica.

Respuesta institucional y comunitaria
Municipales y funcionarios: Aunque muchos estaban de licencia por receso invernal, el 90% del personal del Corralón se presentó voluntariamente a trabajar.

Coordinación: Las tareas se organizaron con base en equipos de radio VHF, teléfonos fijos y comunicación con radios AM como LU12.

Ayuda nacional e internacional: Martínez contactó al intendente de Quebec para consejos de manejo de nieve. Se sugirió crear montañas de nieve para evitar inundaciones por deshielo rápido.

Abastecimiento garantizado: Se mantuvo el suministro de alimentos, medicamentos y combustible. Las fuerzas armadas facilitaron accesos a zonas inaccesibles como Chacras.

Atención social: Se evacuaron viviendas por riesgo de intoxicación con monóxido, se asistió a parturientas (hubo una noche con 6 o 7 partos), y se priorizó el contacto con vecinos más vulnerables.

Detalles y anécdotas
Se realizaron más de 3.000 viajes de camión para retirar nieve.

Se usaron cadenas de hamacas de plazas para equipar vehículos municipales.

Se mantuvieron guardias nocturnas en todas las áreas del municipio.

La ciudad también enfrentó otro temporal con cortes de luz y destrozos en la costanera, poco después de la nevada.

Nadie murió durante la emergencia, algo que Martínez destacó como uno de los logros más importantes.

Frases destacadas de Martínez:
“Cuando pasan cosas muy graves, tenés que dedicarte a solucionar los problemas de la gente”.

“Todos trabajaban y no había cargos, jerarquía ni galones. Había que salir a laburar y se hacía”.

“Hicimos cosas que en otro momento no hubiéramos hecho, como enganchar un camión con combustible para evitar que volcara”.

Un recuerdo inolvidable para los niños
Aunque fue un evento dramático para la ciudad, para muchos niños de la época fue una fiesta: jugaron en la nieve como nunca antes. El contraste entre la dureza de la emergencia y la inocente alegría infantil fue uno de los recuerdos más vívidos.