Este año, en su segunda participación, la santacruceña Perla Flores se consagró paisana nacional del Festival Nacional de Malambo. Los momentos vividos durante el sábado y todos lo que vendrán serán su tesoro.
“Cuando supimos que era finalista estaba muy emocionada, porque el nivel del país es muy alto. Uno trabaja, pero cuando llega y cuando cuesta, uno no lo puede creer. Fue muy movilizante“, cuenta Perla a La Opinión Austral a menos de 24 horas de haber logrado su sueño.
En 2023 fue la primera paisana provincial y presentó una obra sobre el dolor de Carmen Villegas, madre de Juan Esteban, fusilado en las Huelgas Patagónicas.
Este año y tras meses de ensayo de “Canto deudo y la leyenda de la viuda negra“, Perla se presentó en Laborde. “Ya sabés qué es lo que querés comunicar y cómo, pero es otro escenario, otra gente y es difícil contar una historia y tratar de que llegue, en este caso a un jurado que no ha pisado la provincia de Santa Cruz”, explica.
En la noche del sábado, en la final, asegura: “Tenía muy en claro a qué había venido a Laborde, por qué me había preparado y cuál era el mensaje que quería dar, que se conozca desde la identidad carbonera, a través del personaje la viuda negra, lo que siente la mujer de un minero y de cómo vivimos en Santa Cruz a través de la música sureña, en este caso interpretada por el músico ‘Chucu‘ Rodríguez“.
“Uno tiene el deseo y no sé si el presentimiento, porque por los comentarios que recibía sabía que había muchas chances. En la primera pasada recibí mensajes de maestros de muchos lugares del país, me decían que había muchísimas posibilidades, quizás el trabajo fue bueno y se pudo lograr que fuera real, natural, sentido, pero cuando hay jurados es ajeno y más cuando hay un nivel tan alto”, comenta sobre cuáles eran sus pensamientos.
“Tengo la bendición de ser la nueva paisana nacional de Santa Cruz”.PERLA FLORES
“Para los que somos de la cuenca, todo lo que refiere a la mina nos sentimos hiperrepresentados, pero que un maestro reconocido como Sergio ‘Pampa‘ Pérez se haya comunicado con la profesora Espinoza diciéndole que se había emocionado hasta las lágrimas y que creía que había altísimas posibilidades; o el profesor de la provincia de Salta diciendo que no había podido ver la presentación porque estaba en Jesús María, pero que estaba enterado y si estaba en la final era por algo; Cristian Ibarrola, muchos maestros, bailarines, directores del ballet nacional folclórico, como Candelaria Torres, todo eso a uno le daba el pie para decir que el trabajo fue bueno, pero de tanta adrenalina que se vive uno no dimensiona. Hasta ahora no lo dimensiono”.
Los resultados se anunciaron en la madrugada de este domingo y cuando escuchó su nombre, cuenta que pensó: “Sí, estoy lista, estoy preparada para lo que se viene, estoy dispuesta a empezar este nuevo camino de aporte para las generaciones que vienen, para seguir difundiendo nuestra identidad y seguir construyendo”.
Se desconoce cuál será el futuro de YCRT y ante esto, afirma: “Somos trabajadores de la cultura y nuestra manera de visibilizar y de dar voz es a través de obras. Todos sabemos de la situación actual, pero antes de preocuparnos y alarmarnos, lo importante es hacer. Todos los bailarines están tratando de trabajar temáticas santacruceñas, vemos los problemas y quizás los podemos llevar a un escenario y eso nos permite saber qué posición tomamos”.
Marca además que “es sustento de mi pueblo, pero hay más, hay tradición, hay cultura, que quizás en la agenda política es lo último. Hoy por hoy, más allá de tener una posición política con respecto a la mina, considero que deberíamos tenerla siempre. Para mí es más importante el hacer que el decir y creo que eso se vio reflejado”.
Destacó a Aníbal Albornoz Ávila, Héctor “Cuchu“ Rodríguez, Ariel Arroyo, Facundo Cruz, Matías Padilla, Matías Sosa, Verónica Castronovo, Gabriela Cuyul, José Pareja, Edgardo Reynoso y John Flores, que fueron parte del equipo que hizo “todo a pulmón”.
“El año pasado fui la primera paisana provincial y ahora tengo la bendición de ser la nueva paisana nacional de Santa Cruz. Ser consagrada a nivel Patagonia es un honor, pero a la vez representa una gran labor que se viene por delante, estoy muy contenta”, cierra.
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