Carlos “Charly” Pisoni es hijo de Rolando Pisoni e Irene Bellocchio, militantes de la Juventud Universitaria Peronista y la Juventud Trabajadora Peronista, secuestrados y desaparecidos en agosto de 1977.
Actualmente, es referente de Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio (H.I.J.O.S Capital) y en el marco del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, dialogó con LU12 AM680 para expresar sus sensaciones a 46 años del último golpe cívico/militar.
“Todavía nos quedan muchas cosas por conocer, esto es así principalmente porque los genocidas nunca han hablado, nunca dijeron qué pasó, qué hicieron con los cuerpos de nuestros padres, dónde están los nietos y nietas que faltan”, aseguró Pisoni.

Carlos Pisoni, referente de H.I.J.O.S. Capital.
Por otro lado, se refirió a las expresiones negacionistas respecto a la cantidad de desapariciones que ocurrieron durante la dictadura cívico/militar.
“Cuando se pone sobre la mesa de la discusión sobre los 30.000, nosotros lo decimos siempre, el número es una construcción. Pueden ser que sean 15, 20 ó 40 mil, es una construcción que hicimos en base a investigaciones. Pero quiénes tienen que decirnos cuántos son, son los genocidas. ¿Por qué aparecen nuevos nombres? porque no sabemos la verdad“, remarcó.
En esa línea, Pisoni sostuvo que “siempre hay que recordar a nuestros 30.000 y sus luchas, hay que recordar que estaban desaparecidos porque eran militantes políticos, porque se opusieron a la dictadura“.
Además, el miembro de H.I.J.O.S indicó que hubo un antes y un después en la lucha por la memoria, justicia y verdad con la decisión de Néstor Kirchner de transformar estas reivindicaciones históricas en políticas públicas.
“Néstor estuvo un paso adelantado, si bien los organismos lucharon por más de 30 años, no había un reclamo popular por el juicio y castigo. Él logró hacerlo política pública y que hubiera adhesión. Gracias a esa decisión política la Argentina volvió a ser un poco más justa“, resaltó.
Por último, Pisoni habló respecto a las nuevas generaciones que se mantienen escépticas respecto a lo ocurrido en la última dictadura y adhieren a discursos negacionistas.
“Creo que hay que poder interpelarlos, que tenemos que poder comunicarnos con estos sectores porque sin dudas, si ellos no se involucran, la vida política argentina es más difícil“, aseguró.
En este marco, ponderó un hito reciente que signó la defensa de las banderas de la memoria, verdad y justicia en Argentina en mayo de 2017, cuando la Corte Suprema de Justicia concedía el beneficio del “2×1” a los represores condenados por delitos de lesa humanidad.
“Esa histórica marcha en contra del 2×1 fue un freno, donde un millón de personas en todo el país se movilizó en contra de la decisión de la Corte Suprema y del Gobierno de Mauricio Macri de liberar a los genocidas. Siempre la movilización popular marca un termómetro y en es momento marcó que con los temas de memoria, verdad y justicia no se puede retroceder“, concluyó.
Leé más notas de La Opinión Austral
Compartir esta noticia