Un grupo de chicas se percató de que sus compañeros de curso habían alterado imágenes que ellas publicaron en redes sociales para difundirlas. En estas imágenes, las estudiantes aparecían sin ropa.
Las alumnas interrogaron a los implicados sobre sus acciones y el origen de las fotos, pero no obtuvieron respuestas. Se sospecha que los menores vendieron las imágenes a través de WhatsApp y Telegram.
Se identificaron siete víctimas, aunque hasta el momento solo una presentó una denuncia formal. Los investigadores temen que otras escuelas estén involucradas, aunque la acusación se refiere a chicos que comparten el aula.
Desde el colegio Don Bosco, donde asisten tanto las víctimas y victimarios, señalaron que los primeros en presentarse en la institución fueron los padres de los estudiantes implicados, quienes ofrecieron su colaboración. Luego, también se acercaron los padres de las chicas afectadas, solicitando sanciones para los sospechosos.
El establecimiento educativo aclaró que “los hechos sucedieron fuera de la institución y por fuera del horario escolar”. En tanto, la Policía de Chaco informó que Departamento de Cibercrimen y la División Delitos Tecnológicos trabajan para analizar los pasos de los usuarios que crearon las imágenes y el alcance que tuvieron.
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