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La histórica jornada de hoy en el Estadio Único Madre de Ciudades no solo coronó a Platense como campeón del Torneo Apertura 2025, sino que también dejó una imagen profundamente emotiva: Sergio Gómez, con lágrimas en los ojos y un puñado de pasto en la mano, dedicó el triunfo a su madre.
Tras el pitazo final que confirmó el título del “Calamar” al vencer por 1 a 0 a Huracán, la euforia de los jugadores se mezcló con la emoción del entrenador, quien forma dupla técnica con Favio Orsi.
Completamente conmovido, se arrodilló y tomó un poco de césped del estadio donde su equipo hizo historia. Con la voz quebrada, pronunció un sentido homenaje a su madre, un gesto que tocó a todos los presentes y a quienes seguían la transmisión.
La imagen de Gómez, sosteniendo un trozo del campo y reconociendo a uno de sus pilares fundamentales, se transformó en el símbolo del logro de “Los Marrones”.
Su emoción representó no solo el esfuerzo de toda la temporada, sino también el camino recorrido por el club y la importancia de un campeonato largamente esperado. Sus lágrimas reflejaron el sentimiento compartido por el equipo y la hinchada que finalmente vieron concretarse un sueño.
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