Murió Delia, mamá del maestro soldado que fue a Malvinas por San Martín y Belgrano

Julio Rubén Cao fue un maestro de chicos y chicas de 3° grado de una primaria de La Matanza que decidió ir como voluntario a la guerra de Malvinas. La decisión no fue para nada fácil, estaba casado y en 4 meses esperaba el nacimiento de su hija. “Yo no podría nunca sentarme frente a un escritorio a hablar de San Martín y Belgrano si hoy me meto debajo de la cama; voy a ir y voy a volver para contar la verdadera historia de la guerra”, le dijo a su mamá, que, como cualquier madre, estaba en contra de que su hijo fuera a una guerra.

Julio nunca regresó de Malvinas y ella, Delmira Hasenclever de Cao, falleció ayer, después de haber dedicado su existencia a honrar la memoria de su hijo.

La historia del soldado Cao fue contada por el profesor Leonardo Abrahan, un profesor de Río Gallegos, en un libro que fue presentado en el marco de la Feria Provincial del Libro. “Julio Rubén Cao. Maestro soldado” (Dunken).

Mientras luchó por la Patria desde un pozo de zorro de un metro por dos a 3 kilómetros de Puerto Rivero, antigua capital de las islas, escribió una carta dirigida a sus alumnos del tercero “D” de la Escuela N° 32 de Laferrere: “No hemos tenido tiempo para despedirnos y eso me ha tenido preocupado muchas noches aquí en Malvinas, donde me encuentro cumpliendo mi labor de soldado: defender la bandera”, comienza el escrito dirigido a sus estudiantes.

Delmira, por su parte, fue presidenta de la Comisión de Familiares y logró traer los restos de su hijo al continente. “Teníamos miedo, ellos están en su tierra, ahí murieron, por ella dieron todo, así no lo van a poder negar nunca porque ahí son banderas que flamean y si llegan a sacar los cuerpos de ahí, se termina de perder toda la lucha de nuestros hijos”, sostuvo.

Ayer, el secretario de Asuntos Relativos a Malvinas, Guillermo Carmona, lamentó su muerte y recordó a Delmira, en quien “como en tantas otras madres, hermanas e hijas, sigue viva la llama de quienes homenajeamos hace 40 años. Que en paz descanses querida Delmira. Les mandamos un fuerte abrazo a toda su familia y seres queridos en este momento. Tu querido Julio ya estará abrazándote”.