La voz de María Macías se entrecorta por momentos. Es difícil contener la emoción que brota, que se sitúa a flor de piel al rememorar los instantes en que los corredores se abrazan a los cronometristas luego de un esfuerzo supremo. Acaban de darlo todo, llevando el físico a un extremo donde se tocan los límites de lo posible, el sufrimiento y la sensación impagable del objetivo cumplido. Tan poderoso como nacer de nuevo.

Es imposible no involucrarte como organizadora en lo que les sucede a los atletas, los conocés, compartís con ellos, hacés fuerza para que disfruten y lleguen, cada cual a su ritmo y en la medida de sus posibilidades”, nos cuenta esta riogallleguense de 26 años que desde la primera hora, junto a Mauricio Gómez Bull, Beto Cárdenas y muchos más, se pusieron al hombro una idea innovadora, crearon la página de Facebook, que hoy cuenta con 2.700 seguidores pero arrancó con 20 atletas, y arremangaron sus camisas para ponerse a pintar a mano remeras blancas con el logo del Running.

¿El objetivo? Darle un marco organizativo y de promoción a las ganas de tanta gente necesitada de un cable a tierra. En el inmenso territorio santacruceño, fue sumando adeptos la modalidad de correr por placer, estableciendo tiempos y metas, en la mayoría de los casos gente que no había corrido en su vida. “Yo arranqué con el cronómetro, que en ese momento era mi celular, y fui viendo la evolución en el número de participantes. Las remeras pasaron a personalizarse, los atletas se movían entre localidades para correr (lo cual significaba interés) y con la Carrera Nocturna del 2015 llegamos a los 250 inscriptos”, le cuenta a La Opinión Austral María, recientemente recuperada de Covid-19 y escuchando de fondo a Callejeros, su grupo preferido, mientras acaricia a Afrika, su perra Westie.

Continúa reflexionando que “en carreras solidarias hemos llegado a los 300 participantes, fuimos aceitando la logística de poder conseguir albergues en Río Turbio y San Julián y pequeños avances de prueba y error, porque nadie nace sabiendo. Me apasioné con mi tarea y sumé a la función en el cronómetro la tarea de inscribir y registrar, a clavar las estacas en los circuitos con los compañeros, entregar agua a los competidores, manipular los inflables de llegada y largada, un poco multifunción, pero siempre ayudada porque las carreras tienen un ambiente muy familiar, de mucho lazo de amistad y solidaridad”.

Completa su reflexión con que “es muy grato observar a personas que empezaron a participar y son recuperadas del alcoholismo, buscando una calidad de vida mejor, mujeres que transitan el cáncer de mama y se ponen a correr y hacen triatlones y ganan, es enorme la cantidad de historias de vida que se encuentran en el running”.

 

María Macías, una de las referentes. FOTO: FACEBOOK

Las condiciones de trabajo a nivel mundial dieron un giro brutal debido a la pandemia y los atletas no fueron la excepción. La virtualidad reinante hasta que se consoliden las vacunas llevó a diagramar actividades donde se mezclan el compromiso personal, la ecología y el correr. Tal es así que nace la idea de la EcoRun, que durante el fin de semana venidero pondrá en marcha a decenas de atletas esparcidos por toda la provincia. Es la segunda que organiza Running Santa Cruz bajo esta nueva modalidad, siguiendo un camino que siempre ha entrelazado lo solidario (justicia por Diego Jaramillo, carrera solidaria por Nico Martínez), la concientización (Día del Autismo, Día del Donante de Médula Ósea) y el esfuerzo supremo (la recepción a Martín Rodríguez uniendo el país corriendo en 2015).

En la EcoRun se darán cita atletas de todo el territorio, desde Río Gallegos a Lago Posadas. Ya con los kits en manos de los organizadores, los corredores se aprestan a sumar sus kilómetros y compartirlos de manera virtual entre el 14 y 15 de noviembre. Bajo el lema de “¡Promovemos la ecología y la actividad física, ganándole al sedentarismo en tiempo de pandemia!”, las manos empiezan a atar fuerte las trenzas de las zapatillas, el espíritu se prepara para afrontar el camino y los kits se abren ansiosos para darle cuerpo a cada uno de los espíritus de superación.

 

1 de julio. Emotiva despedida a Lucio. Runners corriendo a su lado. Foto: José Silva/La Opinión Austral

 

Por siempre

En el corazón de todos los runners santacruceños se encuentra la memoria de aquellos que ya no están físicamente en este mundo. Jonathan Canto, Lucio Andrade y María Belén Burgoa son los nombres propios que convocan a la introspección y el recuerdo sentido. Cada uno de ellos dejó una huella indeleble en el ambiente y habita en el alma de cada corredor que espera con ansias una carrera más, para nunca dejar de homenajearlos.

 

 

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