Paro de colectivos en Caleta Olivia: “Está todo parado por 24 horas”, aseguró la UTA

Desde la medianoche de este martes 6 de mayo, el transporte público urbano de Caleta Olivia se encuentra completamente paralizado debido al paro nacional convocado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), en reclamo de mejoras salariales. La medida de fuerza, que se extenderá por 24 horas, fue confirmada por Oscar Contreras, secretario general de la UTA local, quien explicó que “no está trabajando ningún coche de transporte urbano, está todo parado”.

Cabe recordar que la empresa Urbano SE depende, íntegramente, del Municipio, pero sus trabajadores están encuadrados en UTA. “Nosotros estamos al día con la aplicación de la escala. Lo que está en discusión es una nueva actualización salarial” explicó el referente gremial a La Opinión Austral.

Aunque la medida nacional es para el transporte de corta y media distancia, Contreras explicó que la paralización afecta sólo al transporte urbano y no así al transporte minero o hacia otras localidades de la zona norte.  “El paro es total en el sector de transporte público acá y a nivel nacional, debido a la falta de un acuerdo salarial”, afirmó Contreras.

Por la noche del lunes la empresa municipal Urbano SE informó a los usuarios que tras la comunicación de la UTA “está confirmada la medida de fuerza y debido al alcance nacional de la misma también adherirá la filial Caleta Olivia por lo que confirmamos que mañana 6 de mayo NO HABRÁ SERVICIO”.

En Caleta Olvia los sueldos de los choferes oscilan entre $2.200.000 y $2.300.000 de bolsillo

En otras localidades

En relación al impacto en el resto de la provincia, Contreras detalló que en localidades como Río Gallegos también se había dispuesto acatar la medida. Sin embargo, en la capital provincial, la empresa CityBus confirmó que presta servicio con total normalidad, una diferencia que, según Contreras, podría deberse a particularidades locales o a la disponibilidad de choferes habilitados.

Lo cierto es que si bien la UTA en Río Gallegos adhirió al paro de colectivos, la empresa CityBus, concesionaria del servicio municipal, garantizó que de todas formas haya servicio para los más de 10 mil usuarios de la capital de la provincia de Santa Cruz.

La pretensión salarial

Contreras detalló que, en Caleta Olivia, los sueldos de los choferes oscilan entre $2.200.000 y $2.300.000 de bolsillo por una jornada de 8 horas, cifras que consideran insuficientes ante la inflación y el costo de vida. “Estamos al día con los salarios hasta abril, pero la negociación salarial aún no ha cerrado un porcentaje definido”, añadió.

En cuanto a las demandas, aclaró que UTA reclama un incremento salarial mínimo del 20%, en línea con las negociaciones a nivel nacional, donde inicialmente se ofreció un 6%. El dirigente gremial desmintió que se pretendiera un 40%. “Es no es verdad”, afirmó.

En Caleta Olivia, la suspensión del servicio urbano impacta de lleno en la rutina diaria de cientos de vecinos que dependen de los colectivos para movilizarse. Mientras tanto, la incertidumbre persiste: si no hay avances en las negociaciones, el conflicto podría escalar aún más en los próximos días.

Un conflicto que viene de larga data

El conflicto salarial entre la UTA y las cámaras empresarias lleva varios meses sin resolución. Según explicó Contreras, anteriormente el gremio logró llegar a acuerdos locales en Caleta Olivia gracias a una negociación local.

La expectativa es que en las próximas horas se conozcan novedades respecto a la continuidad o modificación de la medida, dependiendo de la respuesta que obtenga el Consejo Nacional del gremio de parte de las empresas.

Desde UTA Caleta Olivia aseguraron que, en caso de no llegar a un acuerdo, continuarán en estado de alerta y negociarán de manera local con las autoridades municipales o provinciales para buscar soluciones inmediatas.

La medida busca visibilizar la situación de los trabajadores del transporte y presionar por condiciones laborales dignas. Contreras advirtió, que si bien se pretende seguir negociando, “de ninguna manera vamos a aceptar el 6% que nos ofrecieron“.

Riesgo de paro por tiempo indeterminado en el servicio de colectivos

La medida de fuerza actual es por 24 horas, pero no se descarta que se agrave si no se obtiene una respuesta favorable del Gobierno nacional. “Estamos esperando el llamado para una nueva negociación. Si no hay avances, el paro podría pasar a ser por tiempo indeterminado”, advirtió Contreras.

Desde la UTA local subrayaron que la voluntad de diálogo permanece abierta y que mantienen contacto permanente con la conducción nacional. “Somos positivos. Siempre vamos con la expectativa de llegar a un punto medio. Pero si no hay una propuesta seria, la medida se va a endurecer”, advirtió el dirigente gremial.

Transporte urbano en crisis: falta renovación de flota en Caleta Olivia

Otro punto que preocupa a los trabajadores del transporte urbano es la falta de renovación de unidades. Contreras, en declaraciones formuladas a Canal 2 de Caleta Olivia, reconoció que la flota actual está envejecida y que no hay, por ahora, ningún plan concreto para su recambio. “Tenemos una flota bastante viejita. Se mantiene en funcionamiento gracias al cuidado de los choferes y al apoyo del municipio. Pero no se ha hablado oficialmente de incorporar colectivos nuevos”, lamentó.

La falta de unidades modernas se vuelve especialmente crítica en una ciudad en crecimiento como Caleta Olivia, donde ya se están desarrollando nuevos barrios en el oeste. “Las distancias son largas y muchas veces los niños tienen que caminar mucho para llegar a la escuela. Hoy, con el paro, seguramente muchos no pudieron asistir”, señalaron desde el gremio.

Expectativas ante el nuevo secretario de Transporte

Consultado sobre la designación del nuevo secretario de Transporte a nivel nacional, Gabriel Gusso, Contreras fue contundente: “Empezó mal. Esperábamos un gesto de diálogo. Necesitamos que se siente a conversar y haga una oferta razonable. Si le va bien a él, nos va bien a todos”, cerró.

El paro nacional de la UTA se enmarca en un contexto económico adverso, donde la falta de acuerdos salariales y el retiro de subsidios por parte del Gobierno nacional tensionaron las relaciones entre trabajadores, empresas y el Estado.