A la espera del Registro del Programa de Cannabis, algunas localidades de Santa Cruz elaboran la posible legislación de licencias para la plantación, cultivo y producción de la planta. Puerto Deseado, con el concejal Mario Cambi encabezando la gestión, Piedra Buena y Puerto San Julián son los municipios de la provincia que intensifican gestiones para lograr terminar con la criminalidad que arrastra la marihuana.

Puntualmente, las ordenanzas que proponen tanto Piedrabuena como San Julián son una adhesión a la Ley Provincial que aprueba la Ley Nacional N° 27.350, de investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados.

Por otra parte, en Deseado hay una apertura de las autoridades municipales para gestar una figura de autocultivo en la localidad, creando así un registro local de los propios cultivadores y consumidores, incluyendo aquí a quienes cultiven de manera “solidaria” -la alternativa que permite que una persona pueda cultivar para otra que precise del cannabis para contrarrestar cierta patología-.

“Hay que darle el lugar al cannabis como un servicio y no como un delito”, comentó Ana Marzano, presidenta de la Asociación Provincial de Cannabis Medicinal.

 

Hay que darle el lugar al cannabis como un servicio y no como un delito

 

Enseguida, en diálogo con La Opinión Austral, Marzano confirmó que la propuesta del concejal Cambi en Puerto Deseado suma además la creación de un Consejo Consultivo Permanente -que tendría dentro de sus integrantes a referentes de AProCaM-.

“Se presentó un documento a nivel nacional, firmado por todas las organizaciones del país involucradas, para solicitar la inmediata implementación del registro, que aún no se ha realizado. Mientras esto sucede, con las personas en la clandestinidad, las familias siguen sufriendo inconvenientes”, expresó la mandamás de la asociación.

En ese sentido, confirmó que algunos socios de la provincia -que consumen derivados del cannabis por sufrir distintas enfermedades- perdieron sus cultivos a causa de allanamientos por las fuerzas de seguridad. “Todo esto se termina con la creación del registro”, concluyó.

Por último, respecto a la situación en la capital santacruceña, Marzano expresó: “En Río Gallegos, esperamos poder reunirnos con algún concejal. Nos haría falta poder conversar con un bloque interesado en el tema, creemos que es posible poder hacerlo. Nos gustaría poder compartir nuestros proyectos”.

Buenos Aires

El Gobierno de esa provincia crece en sus gestiones para regular la investigación, producción, comercialización e industrialización del cannabis para uso medicinal. Esta semana se presentó en la Cámara de Diputados bonaerense el proyecto de ley que crea la Agencia y el Registro Provincial de Cannabis.

Esta presentación del proyecto fue hecha por la ministra de Gobierno de Buenos Aires, María Teresa García, y Daniel Gollán, ministro de Salud bonaerense, por pedido expreso del gobernador Kicillof. En este contexto de exposición, García comentó: “Nos permite avanzar sobre la definición de una política pública integral sobre la temática del cannabis desde la investigación, la producción, la comercialización, la autoproducción y la industrialización”.

Según fuentes cercanas, la creación de este Registro Provincial de Cannabis funcionaría para la inscripción voluntaria de las personas que requieran asistencia del Estado para obtener los diferentes productos indicados por prescripción médica.

Argentina-Brasil

Los dos países, esta semana, acordaron impulsar la producción y comercialización del cannabis. Aprovechando los marcos regulatorios actuales que significaron la creación de un mercado legal de cannabis medicinal, la Cámara Argentina de Cannabis confirmó la firma de un convenio con la Asociación Brasileña de la Industria de Cannabis.

“Este acuerdo es un gran paso para consolidar el trabajo que venimos realizando en torno a la regulación del cannabis en nuestros países. Buscamos desarrollar un mercado latinoamericano, explorar oportunidades que fomenten acuerdos comerciales y de inversión bilaterales, y una agenda de cooperación académica y científica”, dijo Pablo Fazio, presidente de la Cámara Argentina de Cannabis.

 

Leé más notas de La Opinión Austral