Perito Moreno pasó las últimas Fiestas de Navidad y Fin de Año lamentando la desaparición de un vecino de la comunidad: Mario Ernesto Curín.

El hombre dio sus últimas señales de vida entre el 24 y el 31 de diciembre de 2020. Nunca más se supo de él, hasta que finalmente el 31 de enero pasado fue encontrado muerto en una zona rural.

Las circunstancias de su hallazgo fueron contundentes para los investigadores, y se señaló el hecho como un suicidio.

El superintendente de Seguridad, comisario general Dante Jattar Abboud, dijo que junto al cuerpo se secuestró un arma de fuego calibre 22 “con la que el desaparecido se habría disparado”.

Mientras que la jefa de la Comisaría peritense, Nélida Codutti, agregó que el cadáver se encontró “en una mata con un arma de fuego y en estado de descomposición”.

La causa se cerró de esta manera, como un suicidio, algo que disgustó a la familia del hombre, quien estuvo desaparecido por más de un mes.

Curín padecía una patología mental (esquizofrenia) con antecedentes de intervenciones policiales en algunos de sus brotes.

Desconfío de que mi padre haya decidido quitarse la vida por voluntad propia por muchas razones”, dijo su hija, Admira Curín Rijo.

En ese sentido, marcó que en el último tiempo mantuvo conversaciones hablando de “proyectos” con él, y dijo que el hombre estaba refaccionando su casa, dando a entender que planificaba varias actividades a futuro.

 


Por otro lado, señaló la ropa que utilizó para salir de su casa: “Se sacó su ropa de laburo y se cambió con ropa para salir al pueblo, puntualmente ropa nueva y en buen estado, zapatos de vestir”. Y agregó: “Cuesta creer que un hombre que toma una decisión tan extrema se vista de esa manera y con ese tipo de calzado se vaya caminando a 7 kilómetros de su chacra a pegarse un tiro”.

Aseguró que su padre estaba aguardando por su visita (ella vive en Paraná, Entre Ríos). “Me estaba esperando, cuesta pensar que tenga esos planes. Me cuesta”, resumió.
Por último, criticó cómo se manejó la búsqueda desde el principio por parte de la Justicia, y que no sólo ella tiene dudas sobre la muerte de su padre.

En ese sentido, dijo que el 4 de febrero “apareció mágicamente el celular de mi papá en su casa y en un lugar donde sabemos que no estaba. Alguien está queriendo manipular todo el caso y déjenme decirles que no lo van a lograr, porque yo voy a buscar justicia”, cerró.

 

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