Hoy 25 de agosto se conmemora el Día del Peluquero, fecha que coincide con la crisis en el sector que, por la pandemia, tiene a todos a puertas cerradas.
Gustavo Castillo forma parte del equipo Lequipe Coiffeurs, sobre Maipú al 1125. Trabaja hace 35 años y contó a La Opinión Austral cómo pasará este día.
Isabel lleva más de 40 años entre tijeras.
“Es una situación muy difícil, en mis 35 años de profesión nunca tuve una crisis tan complicada. En este día especial no podemos festejar o arengar nuestra profesión, ya que lo pasaremos en cuarentena y encerrados, sin poder utilizar las tijeras”, explicó.
Gustavo indicó que, al igual que sus colegas, apelan “a la solidaridad de los gobernantes” para que “consideren la situación y nos dejen trabajar”. Contó que “muchos colegas, incluyéndome, vivimos de la peluquería, que no es una fuente de contagio, nosotros trabajamos con turnos y con todos los protocolos”.
Para el estilista, será “un día atípico, sin reunión ni festejos, pero para mí es un orgullo ser peluquero”.
Del mismo modo, Marcos Centeno tiene su salón sobre Bernardino Rivadavia al 209. Lleva 20 años en la profesión y vive en nuestra ciudad hace 13.
“Este día será atípico, todos estamos a la expectativa de que pronto nos permitan abrir nuestros salones”, describió en primer lugar el profesional.
Marcos lleva en la ciudad 13 años.
“Ya llevo 20 años, cuando terminé el secundario en el año 98 me anoté con la mamá de un amigo al Instituto Superior de Belleza Integral en Mercedes, provincia de Buenos Aires, ciudad donde nací, y desde ese entonces no he parado”, relató.
Para Marcos: “Es una profesión que amo, es lo único que sé hacer, me abrió muchas puertas, me ha enseñado tanto y aun me sigue enseñando constantemente”.
Dijo que la peluquería le permitió “conocer gente maravillosa”, desde colegas a clientes y clientas. “Como siempre decimos, la peluquería es nuestra casa, sólo nos falta instalar el colchón, porque es el lugar donde más horas pasamos durante todas nuestras vidas”, profundizó.
Gustavo espera poder retomar la labor pronto.
Isabel Cardoso, en tanto, trabaja desde que tenía 18 años como peluquera y lleva casi 40 en la profesión. Tiene su comercio en Alberdi 385 y, al igual que sus colegas, no pudo reabrir sus puertas.
“Este es un año diferente, no trabajamos, pedimos por redes por la apertura y la pronta vuelta a las tijeras, así que sí es un festejo diferente. Yo llevo casi cuarenta años en esto, tengo mi local hace 24 años y realmente necesitamos poder trabajar”, explicó angustiada.
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