El juicio por la megacausa de abigeato en Río Gallegos llega a su fin. Este mediodía, el empresario Oscar Núñez conocerá la sentencia en su contra por el delito de abigeato agravado, imputación por la que afronta hasta 13 años de prisión de condena efectiva.
El caso se remonta a mayo de 2014, fecha en la que se registró un robo de ganado millonario en las estancias del interior de Santa Cruz y por el cual, hasta el momento, no hay ninguna persona detenida responsable de tal delito.
La sentencia a Núñez y sus capataces será dada a conocer hoy al mediodía en la Cámara Oral.
Tal como informara La Opinión Austral, se trataba de un cargamento de valor incalculable, que traía a alrededor de mil cabezas de ganado para ser faenadas en uno de los frigoríficos de Río Gallegos y que fueron trasladadas de manera irregular. En una inspección llevada adelante por la Policía, se supo que muchos de esos corderos dependían de otras estancias, no de las que decían las guías.
El por entonces Grupo Especial de Operaciones Rurales (GEOR) interceptó tres camiones jaula que estaban llegando a Río Gallegos el día 8 de mayo.
Núñez, principal acusado del hecho, fue en su momento empresario ganadero y llegó a ser dirigente de la Sociedad Rural, desde donde hoy piden una “condena ejemplar” para él. Ahora se dedica al rubro petrolero y está imputado por presuntamente predigitar el robo del ganado en manos de sus empleados y generar un perjuicio millonario a estancieros de otros establecimientos.

Sus empleados Alcides Soto y Carlos Arrechea, dos capataces que por esos años prestaban funciones en estancias de Núñez, también afrontan severas penas.
Los tres estuvieron 13 días detenidos hasta que la Justicia los liberó bajo caución juratoria. Hoy eso puede cambiar.
Después de nueve años, los jueces Jorge Yance, María Alejandra Vila y Jorge Alonso -como subrogante- dictarán sentencia este mediodía para el empresario y sus dos capataces. Fue mucho tiempo de espera por diferentes contratiempos propios de la Justicia, tales como la Feria Judicial Extraordinaria de 2020, el incendio que se registró en la antigua Cámara Oral, cambios de defensores y un largo etcétera.
A casi una década del hecho, en marzo pasado se inició el juicio con la declaración del propio Núñez, quien aseveró que “le hicieron una cama”, ya que había dejado como encargado a un hombre llamado Cristian Rivera, quien es yerno de Gonzalo Sánchez, uno de los denunciantes. Él cuenta con la representación legal del abogado Alejandro Baldini. En tanto que el letrado Sandro Levin es el representante de Soto y Arrechea.
Frente a ellos, hoy se sentará el fiscal José Chan, quien en su alegato pidió 13 años de cárcel para el empresario. En tanto, por los damnificados estuvieron los abogados Gabriela Blaser, Matías Gutiérrez y Marta Dávila. Esta última fue quien en su alegato pidió una durísima pena para Núñez: 12 años de prisión.
Su alocución duró más de una hora y mantuvo la postura firme en que Núñez sería quien pergeñó el plan de robo sistemático de ganado en el interior de Santa Cruz, y que Soto y Arrechea sólo serían los “brazos ejecutores”.
“A Núñez nunca le dieron los números con sus animales”, expresó Davila durante su alocución, en relación a las contradicciones sobre la cantidad de ganado que tuvo de un tiempo a esta parte.
La abogada, que representa a la familia Sánchez-Del Solar, examigos de Núñez y parte de los damnificados, pidió 10 años para Soto y Arrechea.
En tanto, Matías Gutiérrez aseveró que la mitad de las ovejas eran de su cliente. En su pedido de pena, Gutiérrez hizo el mismo hincapié que Davila en que eran “los brazos ejecutores” y “no hacía falta que Núñez fuera al campo, ya que se manejaba por celular”, tal como dijo Gabriela Blaser momentos después.
Blaser, por su parte, se dedicó a enumerar todas las contradicciones que tanto Núñez como los peones y otros trabajadores habían cometido durante el debate. Fueron más mesurados y pidieron seis años de cárcel para Núñez y cuatro para los capataces. Exactamente la mitad de lo que pidió la otra querella.

Llega libre, ¿se va esposado?
Hay gran expectativa por lo que ocurra hoy en la Cámara Oral de Río Gallegos. Los años de cárcel que afronta el empresario -y sus capataces- son muchos. Esto en virtud de cómo el Código Penal Argentino encuadra el delito de abigeato que en este caso, al ser un hecho agravado, prevé durísimas penas que -aunque parezca muy difícil de comprender- incluso llegan a ser superiores a las de delitos como homicidios o abusos sexuales simples.
Núñez puede o no ir a la lectura de sentencia de hoy. En caso de ser encontrado culpable por el Tribunal, quedará detenido y se definirá posteriormente la unidad del Servicio Penitenciario Provincial donde cumplirá la sentencia.
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