Natalia Lo Presti es guía de turismo provincial y del Parque Nacional Los Glaciares. Ella fue una de las que recibió al contingente de turistas franceses, desde donde se desencadenaron los casos de coronavirus en El Calafate. A diferencia del francés que fue el caso 0 de Santa Cruz, ella fue el primer caso de COVID-19 local.

Allá por el día 13 de marzo, el pasajero comenzó a presentar síntomas, y sin saberlo comenzó a esparcir el virus. En la villa turística hubo un total de 34 contagios, todos ya recuperados.

En el video elaborado por la productora de comunicación política y cine “Sucesos Argentinos“, Natalia relata: “Mi marido tiene una enfermedad crónica y entonces me aislé automáticamente”. “Pasé esos 32 días de aislamiento mirando hacia afuera”, recuerda con emoción.

 

Su pareja se suma al relato y cuenta que durante esos días iba a dejarle comida y se apoyaba en la puerta de la habitación para “hablar con ella un rato”. Sus dos hijas, por otro lado, le gritaban “Hola ma” a lo lejos.

“El 16 de abril fue el día que me dieron el segundo negativo y le digo, ¿puedo salir?”, se acuerda sonriente la recuperada. “Salí, fui a abrazar a mis hijas, a mi marido, y los cuatro nos abrazamos”

La presidenta del Consejo de Administración del Hospital SAMIC de El Calafate, Verónica De Cristófaro, detalla que en ese momento “no contábamos con la posibilidad de tener descentralizado el procesamiento de las muestras, así que la muestra tuvo que viajar en avión al Instituto Malbrán“.

 

“Me acuerdo que era chiquita y me decían ‘Dios atiende en Buenos Aires’, y un poco es romper eso, ¿no?”, señala De Cristófaro sobre la función del SAMIC en medio de esta pandemia.

Para concluir, menciona: “La gente se cura donde hay un Estado presente y una salud pública presente. De hecho, nosotros recuperamos a 34 personas”.

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