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La muerte del Papa Francisco a los 88 años ha coincidido con un hecho singular en el mundo del fútbol: el ascenso del equipo italiano US Avellino 1912 a la Serie B. Esta coincidencia no es nueva. Desde 1958, el Avellino ha ascendido de categoría cada vez que un pontífice fallece o abdica, lo que ha despertado curiosidad y asombro tanto entre fieles como aficionados al deporte.

El sábado pasado, el Avellino venció 1-2 al Sorrento, asegurando su ascenso matemático a la Serie B. Menos de 48 horas después, se confirmaba el fallecimiento del Papa Francisco, sumando un nuevo capítulo a esta enigmática relación entre el club del sur de Italia y el Vaticano.

Curiosamente el Papa Francisco recibió al Avellino en el Vaticano en enero de 2025 y firmó la camiseta del club de fútbol: “Un acontecimiento extraordinario que quedará en la historia del US Avellino. Hace unos días, durante un encuentro en el Vaticano, el Papa Francisco firmó y bendijo la camiseta verde y blanca”.

Cada vez que muere un Papa, este equipo de fútbol asciende de categoría Cada vez que muere un Papa, este equipo de fútbol asciende de categoría 

 

“Agradezco sinceramente al Papa Francisco este gesto de cercanía y aliento. Su firma en nuestra camiseta es una señal que nos inspira a todos a seguir creyendo en nuestros objetivos, dentro y fuera del campo. Estamos seguros de que su bendición también nos trajo buena suerte”, declaró el presidente Angelo Antonio D’Agostino tras su encuentro con el Papa.

Una historia que se repite desde hace más de 65 años

Esta curiosa coincidencia comenzó en 1958 con la muerte del Papa Pío XII, momento en el que el Avellino ascendió a la Serie C. En 1963, tras el fallecimiento de Juan XXIII, el equipo volvió a subir a esa misma categoría. El año más recordado fue 1978, cuando murieron Pablo VI y Juan Pablo I; ese mismo año, el Avellino logró su único ascenso a la Serie A.

La secuencia continuó en 2005 con la muerte de Juan Pablo II, coincidiendo con otro ascenso a Serie B.

En 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, el club volvió a subir de categoría.

Ahora, en 2025, la historia se repite con el fallecimiento del Papa Francisco.

¿Casualidad o destino futbolístico?

Aunque el Avellino no asciende cada vez que hay una temporada destacada, lo cierto es que en todos los años en los que ha fallecido o abdicado un papa, el equipo ha logrado un ascenso. Una conexión que desafía la lógica futbolística y que ya se ha convertido en parte de la mística del club.

EN ESTA NOTA US Avellino 1912

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