Hoy, en el tercer domingo de octubre, se festeja el Día de la Madre en Argentina como todos los años. Sin embargo, nuestro país es uno de los pocos del mundo en el que este festejo se da en este mes. ¿Cuál es el motivo?
Pese a que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó el 1º de junio como el Día Mundial de las Madres y los Padres, en una importante parte del globo el Día de la Madre se produce en el mes de mayo. Por ejemplo, en España es el 1º, en México el 10 y en Estados Unidos el 15.
Sin embargo, en Argentina se celebra el tercer domingo del mes de octubre y el origen se remonta a la historia clásica. En la antigua Grecia se celebraba por esta época la fiesta en honor a la deidad Rea, la madre de los dioses de la primera generación como Zeus, Hera, Poseidón, Hestia, Deméter y Hades. Por su parte, los romanos rendían culto a Cibeles, diosa de la madre tierra y la fertilidad.
Como sucedió con muchas fiestas de la antigüedad, los cristianos se apropiaron estas tradiciones y las asociaron a la celebración de María Madre de la Dios (que desde el Concilio Vaticano II tiene lugar el 1 de enero pero antes la fecha era el 11 de octubre). Para asegurar que los hijos podían disfrutar de la jornada para agasajar a sus mamás, se pasó el festejo para el domingo anterior o posterior por ser un día en el que la mayoría de la gente tiene franco.
Fue así como en Argentina finalmente se determinó que quedara el domingo posterior al 11 y, de ese modo, se estableció de forma definitiva en el tercer domingo de cada mes de octubre.
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