Todas las alarmas se encendieron en horas de la mañana del jueves, cuando se conoció un intento de rapto de dos menores de edad, en la periferia de Río Gallegos.
Todo tuvo lugar en horas de la mañana, cuando unos nenes esperaban el colectivo de la línea D para ir al colegio, cuando fueron abordados por un auto -hasta el momento no identificado- donde, el conductor, los había invitado a “subir”.
Los menores, extrañados por la situación lograron salir de la situación corriendo y el rodado, del que no hay mayores datos debido al miedo que tuvieron los nenes, escapó a toda velocidad por las calles de tierra del barrio Ayres Argentinos.
Fue la junta vecinal de ese barrio quien dio a conocer la situación y alertó a la comunidad sobre lo sucedido. En un comunicado que rápidamente se hizo viral en las redes, las autoridades indicaron que el hecho se registró en: “una parada de ómnibus en nuestro barrio. Hacemos un llamado a la solidaridad de las autoridades, para la inmediata localización de los responsables, y la acción inmediata en prevenir futuras situaciones como esta que han conmovido a todo nuestro barrio”.
En el mismo comunicado, la junta solicitó que “a cada vecino y vecina para que los niños y mujeres puedan esperar el colectivo en lugares más seguros, si hay vecinos que vivan en cercanías de las esquinas: 51 y 22, esquina 51 y 30, esquina 30 y 45, y esquina 45 y 26 del barrio, por favor que puedan estar atentos en las mañanas, u ofrecer ayuda hasta que las autoridades nos den una respuesta”.
Investigación
De acuerdo a fuentes consultadas por La Opinión Austral, se pudo saber que el caso es investigado por la Comisaría Séptima. Asimismo, prestó colaboración el Cuerpo de Prevención Barrial Local y el Comando de Patrullas de la Policía.
Según pudo saber este diario, los efectivos comenzaron con las averiguaciones usando a la parada de colectivos como “punto cero”. Desde ese lugar empezaron a buscar testimonios de vecinos de la zona que podrían aportar más datos sobre el vehículo o cámaras de seguridad que podrían haber registrado al rodado en cuestión o verlo como escapaba del lugar
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