Brianna Matulich: se cumple el primer aniversario del crimen que conmocionó a toda la comunidad de Río Gallegos

“Chinita hermosa, te amamos“, “Siempre en mi corazón“, “Te amo siempre, Cuni“, “Te extraño, extraño jugar a la pelota con vos, negrita, te voy a amar siempre“, “Promo 2019 te ama“, “Te extraño siempre, mi negrita, besos al cielo” y “me cuesta vivir sin vos, te extraño, hija” son solo algunos de los mensajes que aparecen alrededor de la tumba de una joven que tenía toda la vida por delante y que, en este 31 de diciembre, se cumple el primer aniversario de su ausencia.

Las muestras de cariño, expresadas con fibrón negro alrededor del nicho tienen como destinataria a Brianna Matulich, la adolescente de 17 años que, exactamente hace un año, fue víctima de un crimen a manos de un inconsciente que corría una picada en la autovía 17 de Octubre.

La Opinión Austral tuvo el permiso de la familia para mostrar las muestras de afecto que todos los que conocieron a Brianna dejaron en el lugar donde ahora descansan sus restos para toda la eternidad. Además de las frases escritas por sus amigos, también hay stickers de frases del mítico chocolate “Dos Corazones” reconocidos por tener algunos sintagmas relacionados al amor.

Flores de plástico, algunos peluches y hasta un arbolito de navidad son algunos de los adornos que acompañan de una Brianna sonriente rodeada de un corazón rojo en el centro del nicho. Ese lugar fue el elegido por los seres queridos para recordar a la adolescente.

Tal como lo ha informado este diario en su momento, por ejemplo, cuando fue el cumple de Brianna, en ese lugar se hizo una suelta de globos blancos pidiendo justicia por el caso y también un encendido de velas. “Le pido perdón al resto de los vecinos pero es la única forma que encontramos de recordar a mi hija, sin molestar” aseguró en aquella oportunidad Jorge Matulich, padre de la adolescente, en declaraciones a LU12 AM680.

El caso de Brianna caló hondo en la comunidad de Río Gallegos. Desde la madrugada misma cuando se conoció el hecho que tiene como señalado y procesado con prisión preventiva a Esteban González, un empleado bancario que se había dado a la fuga, la capital de Santa Cruz se unió en un reclamo que, hasta el momento no tiene condenados.

Era la madrugada del 31 de diciembre cuando Brianna volvía a su casa junto a sus hermanitos Thiago y Priscila. La primera fue embestida y arrastrada por 40 metros mientras que Priscila, de 14 años, terminó con sus piernas fracturadas. Thiago salió sin ningún rasguño.

Esteban iba a bordo de una camioneta Ford EcoSport, bajo los efectos del alcohol corriendo una picada por la autovía. Su rodado se subió el boulevard y provocó el brutal incidente. Luego, abandonó el lugar a toda velocidad para luego esconderse en su vivienda ubicada en el barrio Codepro.

De no ser por unos taxistas que vieron la secuencia y no se quedaron con los brazos cruzados, González podría haber salido impune. Los trabajadores del volante dieron aviso a la Policía hasta el lugar donde el empleado bancario se había escondido.

“¿Tanto problema por un perro muerto?” fue lo que González le dijo a los policías cuando lo llevaron detenido. Esto fue aportado a la causa por uno de los taxistas que presenció la aprehensión y que consta en el expediente que llegará a juicio en el 2025. Actualmente está detenido en la Unidad Penitenciaria N°2.

Desde la muerte de Brianna hasta hoy que se cumple el primer aniversario del trágico suceso, han habido innumerables movilizaciones, presencia en varios izamientos dominicales exigiendo justicia, la entrega del diploma que hubiera recibido la joven al concluir sus estudios hace unos pocos días y el pintado de la Estrella Amarilla en el lugar donde le arrebataron la vida a la adolescente.

Este 31 de diciembre no será uno más para una familia de Río Gallegos, tampoco para el barrio Belgrano que la había visto crecer, para los compañeritos de la escuela donde incorporaba conocimientos, ni para los amigos con los que compartía risas y buenos momentos en la plaza San Martín, donde disfrutaba pasar las tardes.