La Justicia de San Julián se encuentra en el ojo de la tormenta, acusada de no haber accionado correctamente por un brutal hecho de sangre que, hace más de tres años, está irresuelto y no tiene personas detenidas.
Se trata del brutal femicidio de Zulma Malvar, la médica que fue asesinada en el patio de su casa. Hasta el momento, el autor todavía no está tras las rejas y representa un peligro para toda la sociedad.
Tal como viene informando La Opinión Austral, el caso ha movilizado a toda la comunidad. Se han realizado innumerables manifestaciones cada vez que se cumplía un nuevo mes del femicidio, se han pintado murales pidiendo por justicia y el esclarecimiento, pero hasta ahora no hubo novedades respecto de la autoría.
La causa está en manos de Ludovico Pío Pala, juez que está señalado por la familia de Zulma como el principal responsable por el no avance o el letargo en la investigación para dar con la o las personas que asesinaron a la médica.

El juez Ludovico Pio Pala. (FOTO: UVC)
Uno de los “sospechosos” o al menos señalados por la familia de la víctima es TI, un cirujano que estuvo en la escena del crimen horas después y que hasta en la jornada siguiente mantuvo conversaciones con el fiscal de la causa, Alejandro Victoria.
A él apuntan todos los cañones de Alejandro Jodar, hijo de Zulma, quien presentó una denuncia contra TI por haber sacado fotos con su celular de la escena del crimen y hacerlas circular. Esto fue expuesto en el juzgado el año pasado y hasta hace poco no había avances.
Por esta situación, el hijo de la médica se presentó en las instalaciones de la sede en horas de la mañana del jueves, previo al fin de semana largo, y luego de una larga espera, finalmente fue recibido.
En la previa, Alejandro fue entrevistado por UVC Noticias e indicó: “Estoy esperando que me notifique. Desde hace meses hay una denuncia contra TI (NdeR: el hijo nombró al hombre, pero como no hay procesamiento contra él, este diario no lo nombrará) y lo digo porque ya estoy cansado, si uno sigue manteniéndolo en anonimato, es encubrirlo y protegerlo”, comenzó diciendo.

Una de las últimas fotos de la médica. (FOTO: LA OPINIÓN AUSTRAL)
En el mismo sentido, el hijo de la damnificada, que en un principio también fue señalado por el femicidio de su madre, pero que finalmente se demostró que era inocente, mostró su hartazgo y descontento por el no avance de la causa: “Esto ya no da para más, pasan los plazos procesales y no pasa nada. Vamos a ver si presionamos de otra manera”.
Sobre la denuncia que había presentado y por la que esperaba novedades, el joven, que también es abogado y que cuenta con el asesoramiento de su colega Mauricio Manyare, explicó que “es una resolución de un sobreseimiento con la que no estamos de acuerdo” y remarcó: “Es una cuestión que ya no da más y tiene que tener una resolución, es un tema en el que venimos insistiendo desde hace más de tres años y nadie hizo nada”, comentó en relación al día de la comisión del hecho, el avance del tiempo y el hecho de que no hay personas detenidas ni sospechadas.
“Tuve que presentar una denuncia en abril de 2021 y estamos en octubre de 2022, esta persona entró en casa de mi mamá, sacó fotos, las difundió y nunca dio explicaciones. Esto parece que es una joda, es una viva la pepa, esto no puede seguir pasando”.
Tras haber sido recibido en el juzgado, Alejandro usó sus redes sociales y comentó: “Quiero contarles que hoy (por el jueves) sentí vergüenza como abogado, empleado judicial y por sobre todo como alguien que esta buscando a los asesinos de su madre, de tener que meter presión de la manera que lo hice (porque se que esta mal), pero me he visto obligado debido a las circunstancias, las cosas no deberían funcionar de esta manera”.
“Fueron tres horas de esperar, de tensión, de estar entre policías que custodiaban el lugar por la manifestación de la gente del barrio Popular. Habían ocho uniformados para controlar a tres mujeres y una nena que tocaban el bombo” comentó sobre las circunstancias.
“También siento tristeza y mucha, hoy realmente ha sido un día muy difícil para mi, ver como pasan ex-compañeras de trabajo al lado sin saludar, otras saliendo por la puerta de atrás. Me cansé del boludeo, me cansé de presentar las cosas legalmente y que no hagan nada“, concluyó el hijo de Zulma Malvar, que sigue esperando justicia
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