Ayer se conoció que una de las sucursales céntricas de Autofarma sufrió el robo de 50 mil pesos en efectivo en el mes de abril. Se sospecha de un ex empleado, quien fue identificado y aprehendido, pero por falta de pruebas fue dejado en libertad. Habría ingresado por una ventana y sin ejercer violencia en el local.

Una de las sucursales céntricas de Autofarma en Río Gallegos sufrió un cuantioso robo de dinero en el mes de abril.
Según fuentes consultadas por La Opinión Austral, el ilícito se habría perpetrado sin ejercer fuerza y aprovechando que una de las ventanas del local se encontraba sin la traba de seguridad. Esto posibilitó el ingreso de una persona que posteriormente sustrajo dos bolsos con billetes de diversa denominación, por un valor total aproximado a los 50 mil pesos.
El hecho trascendió en la jornada de ayer. Según se supo, sucedió entre el mediodía y las primeras horas de la tarde del 2 de abril, jornada no laborable por el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas.
El local robado es el que se ubica en avenida Pres. Dr. Néstor C. Kirchner 854 y se sospecha de un ex empleado del comercio.
La Comisaría Primera actuó por jurisdicción en el hecho, recepcionando la denuncia y exposición policial del propietario del local. En el lugar trabajó personal de la División Criminalística, además de solicitarse las grabaciones de las cámaras de seguridad aledañas al local.
Observando una de las grabaciones, el damnificado fue quien alertó sobre el parecido entre uno de sus ex empleados y el sujeto que ingresó al local y sustrajo el dinero.
A partir de allí comenzó una serie de investigaciones para dar con el sujeto, quien posteriormente fue identificado y aprehendido por la Policía.
El Juzgado de Instrucción N° 1 de Río Gallegos tomó el caso. El sujeto, un joven de unos 28 años de edad, fue citado a declarar, tras lo cual se dispuso que recuperara la libertad. Quedó ligado a la causa, que continúa investigándose.
Más allá de la sospecha del encargado de Autofarma, el soporte fílmico no logra captar con calidad la cara del autor material del robo -que actuó sin ningún tipo de cobertura sobre su rostro- y por ello no se pudo determinar fehacientemente quién fue la persona actuante en el ilícito. Esto imposibilitó que el único y principal sospechoso fuese detenido.

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