El barrio José Hernández, donde residía el abuelo, no sale del desconcierto y la conmoción por este lamentable episodio: un vecino de Río Gallegos se encuentra con muerte cerebral luego de dispararse en la cabeza con un arma de fuego, ayer pasado el mediodía, en su propio domicilio.
El hecho conmociona a la capital santacruceña. La principal hipótesis que se baraja es que se trató de un intento de suicidio del hombre, de 80 años. La vivienda no poseía sus ingresos forzados ni hay, hasta el momento, indicios que den cuenta de la participación o presencia de un tercero en el hecho.
El aviso a las autoridades la habría dado un familiar directo del vecino. Cuando la Policía llegó al lugar, se encontraron con el hombre tendido en el suelo en un charco de sangre, en el garage del domicilio. De inmediato se requirió la presencia de una ambulancia, que llegó minutos después.
Un médico y enfermeros subieron al anciano, identificado como Humberto Morales, a una camilla y lo subieron al móvil sanitario para su traslado al Hospital Regional Río Gallegos.
Todo, ante el shock y la sorpresa de varios vecinos que se acercaron al lugar al notar la presencia policial en la casa, ubicada en el Barrio José Hernández, calle Antonio Rivero al 1.200.
Efectivos de la Comisaría Tercera y del Comando Radioeléctrico trabajaron en el lugar.
Irreversible
La ambulancia llegó en cuestión de minutos al nosocomio y el hombre fue trasladado a la Unidad de Terapia Intensiva en donde los profesionales lo atendieron y evaluaron su cuadro. Llegó muy grave y con escasos signos vitales.
Fuentes consultadas por La Opinión Austral detallaron que llegó con muerte cerebral y que su cuadro sería irreversible. Alrededor de las 20 horas, el vecino permanecía en el hospital. Según trascendió, el hombre había cumplido años recientemente.
El arma
En el domicilio, una vez que el hombre fue asistido y trasladado en ambulancia, la Policía realizó una inspección ocular y encontró un arma de fuego tipo revólver, con la que el hombre se disparó en la cabeza. La misma fue secuestrada por las autoridades intervinientes.
Colaborando con sus pares de la seccional, trabajó posteriormente la División Criminalística, a fines de llevar a cabo las diligencias de rigor pertinentes en búsqueda de pruebas que ayuden al esclarecimiento de lo acontecido.
Los trabajos se extendieron hasta pasadas la 17:00 horas y dieron intervención al juzgado de turno, notificándose de lo sucedido.
FOTO: GENTILEZA SANTA CRUZ EN EL MUNDO
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