Los dos representantes de Santa Cruz en la regata más larga de mundo contaron como fue la quinta jornada de la regata sobre el Río Negro.

“Fue una etapa muy dura con muy poca agua pero llegamos enteros y es importante porque esto termina en Viedma. Nos mata el calor porque son más de 38 grados”, dijo Irma Montiel en declaraciones al programa “Juntos y Re-Rueltos” por Radio LU12 AM680 y FM Láser 92.9.

“Hay mucha gente que se sorprende porque somos del sur y nos alienta y te anima a seguir remando. Hay gente que ni conocemos y nos apoyan”, dijo contenta. Pero la regata no es sólo una competición, hay convivencia. “Nos hicimos amigos, ya nos conocen, nos invitan a ir a su casa y compartimos gastos”, contó Irma.

Entre más de un centenar de embarcaciones, los representantes santacruceños siguen en carrera.

Su pareja, Julio Millalonco, retomó el tema del tiempo y la diferencia de entrenamiento con el resto de los participantes. Dijo que salen a las 13 horas, “cuando hace más calor, porque antes controlan los botes y se hace largo. Nos largan por categoría y salimos en el último pelotón”.

“Sabemos que venimos con poquito entrenamiento porque la gente rema todo el año porque en invierno no lo sienten al frío. En el sur remamos muy poco, pero sabemos que la regata la terminamos”, confió.

A partir de ahora el Río Negro se pone más dificil. “A medida que vamos bajando viene con poco caudal y no tenemos la correntada que te lleva. El agua se pone más quieta y hay que remar”, contó Millalonco que lamentó que en la jornada del jueves no hubo ráfagas de viento.

“El viento a nosotros nos favorece porque remamos con viento, pero no hubo como estaba previsto. Si mañana hay viento seguramente nos acomodamos un poquito mejor”, auguró.

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